La optimización de recursos entre varios municipios, mediante convenios de colaboración para abaratar costes y hacer viable y sostenible el servicio, se presenta como la única alternativa y salida viable a los comedores sociales de la tercera edad en la provincia de Zamora. Alcaldes de Aliste, Tábara y La Carballeda ya han iniciado los contactos para buscar una salida que permita sobrevivir a los centros con un menú a precios asequibles para los usuarios sin convertirse en una ruina para los consistorios.

La solución pasará por contar con una cocina industrial en un pueblo y desde ella, mediante catering, atender al resto. La compra de productos al por mayor traería consigo el primer importante ahorro.

Se da la circunstancia que este año la Diputación ha incluido por primera vez la norma de no conceder subvenciones a aquellos comedores de nueva implantación cuyos ayuntamientos cuenten con otros en diferentes pueblos del término municipal.

Riofrío fue el primer ayuntamiento de España en poner en marcha la distribución del menú mediante una furgoneta isotermo, cuyo coste rondó los 30.000 euros, cofinanciado el 45% por parte del grupo de acción local Adata dentro del programa de desarrollo rural «Leadercal», colaborando el Área de Bienestar Social de la Diputación y el Ayuntamiento.

Actualmente la cocina industrial está ubicada en las antiguas dependencias del salón de baile de Sarracín, parte del cual se reconvirtió en comedor social, desde donde se distribuye al resto de municipio: Riofrío (en el comedor social) y a domicilio en Abejera de Tábara y Cabañas de Aliste. Así mismo, fuera del municipio y al otro lado de la Sierra de la Culebra, ya se presta el servio de catering en la localidad de Ferreras de Arriba.

El comedor es atendido por dos cocineras, Ana Moldón Arias y Juana Rodríguez Santos, naturales de Sarracín, las cuales se encargan así mismo de distribuir la comida entre los usuarios de los comedores y pueblos donde no los hay.

Riofrío marca las pautas a seguir en comedores sociales en la provincia de Zamora donde el alto coste de las cocineras y mantener el menú a un precio asequible, entre 3 y 4 euros, solo se podrá mantener , hay unanimidad, mediante la optimización de recursos.

La Diputación de Zamora ya ha tenido en cuenta este año, a la hora de repartir los fondos, el «Servicio de catering»: «Si el Ayuntamiento presta o tiene previsto prestar el servicio de comedor a domicilio, tanto en la misma localidad como en otras. Así mismo el transporte de menús a otro comedor social de distinta localidad habilitado para ello. También se valorará si existe acuerdo legalmente adoptado de varios Ayuntamientos próximos entre sí, uno de ellos con cocina, para prestar el servicio». Todo ello se ha valorado con hasta veinticinco puntos. Con vistas a años sucesivos otro de los valores a puntuar será la prestación del servicio de lavandería para las personas mayores que viven solas y no se valen.