El día 26 de junio de 2006 el Obispo de la Diócesis de Zamora, Casimiro López Llorente, visitaba Villaflor, bendiciendo la que sería primera iglesia del pueblo, la cual se dedico a San Boal, al que junto a su hermana Santa Justa, se considera los primeros mártires alistanos. Ambos encontraron la muerte sobre el lecho del río Esla cuando cruzaban con leña desde la «Dehesa de Mázares» hacia su morada en Manzanal del Barco. Una partida de soldados romanos les sorprendieron y sin piedad los atravesaron con sus lanzas cuadriastas: fue el 20 de abril del año 280.