Han pasado diez años desde aquel 11 de abril de 2002, cuando se hizo oficial la declaración del Parque Natural Arribes del Duero. Un periodo que, es obvio, no puede resumirse en una página de este periódico pero sí proyectar una valoración general de lo que ha supuesto la configuración de un espacio ligado al encajonamiento del Duero formando uno de los más hermosos y sorprendentes paisajes de la geografía zamorana.

Seis alcaldes de algunos de los municipios zamoranos del Parque Natural valoran está década como miembros de un espacio protegido, regido por tanto por unas normas que, en general, no consideran tan restrictivas como para que haya limitado en exceso los usos, en contra de los temores iniciales. En general se puede hablar de un balance con más luces que sombras, aunque los recortes de las ayudas que han venido recibiendo los pueblos por su pertenencia al Parque Natural pueden abrir una nueva etapa.

Manuel Ramos, alcalde de Fariza, cifra la reducción de las subvenciones hasta en un 70 por ciento. En su caso desde los 72.000 euros que ha llegado a percibir el municipio en subvenciones bianuales a los 20.000 últimos. Al margen del hachazo, el regidor sayagués da la bienvenida a las «pequeñas obras, sobre todo de recuperación del patrimonio, que hemos podido realizar gracias al Parque», aunque a la vez lamenta que la declaración del espacio «no ha sido el gran elemento dinamizador de la zona que esperábamos». Echa en falta Ramos una mayor atención a servicios como la calidad de las aguas o las telecomunicaciones.

Sin embargo el Parque de Arribes sí ha sido «positivo» en el aspecto turístico. «Se ha notado un aumento de las visitas y a nosotros nos ha permitido arreglar todo el entorno de la ermita del Castillo y los miradores». Desde el punto de vista social, el Ayuntamiento de Fariza también ha encauzado parte de las ayudas a la residencia de ancianos que se abrirá próximamente.

El alcalde de Fermoselle, sede de la Casa del Parque que ha permitido la recuperación y todo el entorno del Convento de San Francisco, exalta sin ambages los «beneficios» de la declaración de Arribes para este municipio. «El Parque Natural ha representado para Fermoselle una importante fuente de ingresos porque el visitante que viene siempre deja algo aquí. Bien sea en alojamientos, en restaurantes, en tiendas o comprando productos de la tierra», expresa Alejandro Fermoselle. Y si bien considera que existen ciertas limitaciones, como cuando anidan las aves en la zona de los bancales, «desde la dirección del Parque se dan facilidades y se buscan alternativas para que el visitante no se vea perjudicado». El alcalde fermosellano destaca también actuaciones de mejora en la villa gracias a las subvenciones, como en el alumbrado, el sellado de vertederos o la zona de la ermita de Santa Cruz.

Positivo es también el balance que realiza Edesio Cardeñosa, alcalde de Moralina, el pueblo que abrió el primer museo etnográfico gracias a las subvenciones del Parque Natural que incluso recibió un reconocimiento por este proyecto pionero. «Creo que la declaración no ha perjudicado en nada; al contrario, nos ha permitido recibir un dinero y hacer obras que de otra manera no hubiéramos podido». A diferencia de otros pueblos, el Ayuntamiento de Moralina ha preferido derivar las subvenciones, «no para pavimentar calles, porque para eso estaban los planes provinciales, sino para mejora de espacios urbanos; hemos remodelado plazas, se ha recuperado patrimonio etnográfico del pueblo y creo que el entorno ha mejorado bastante», testimonia Edesio Cardeñosa. Otra cosa será el futuro. El regidor de Moralina teme que los fondos recibidos ya no sean los mismos y en el caso de este pueblo podrían haber sido más «si nos hubieran incluido más terreno en el Parque».

El regidor de Torregamones, Francisco Javier Sánchez, destaca la «importante inyección económica» para el municipio, tanto desde el punto de vista patrimonial como para agricultores y ganaderos que se han beneficiado del arreglo de caminos o las naves. Aún así el alcalde echa en falta una mayor promoción de la zona; «es verdad que se nota la llegada de turistas pero me da la sensación de que Arribes del Duero sigue siendo bastante desconocido. Muchas personas vienen casi más por las casas rurales y después descubren el espacio». Francisco Javier Sánchez teme que los recortes económicos, de los que no se libran los parques naturales, «pueden suponer un paso atrás, por eso tendremos que tomar la iniciativa los habitantes del espacio en la línea de la cooperativa que se pretende hacer con Miranda do Douro».

El alcalde de Villadepera, José Ignacio Isidro, inclina la balanza hacia los beneficios aunque puntualiza que las limitaciones en usos, sobre todo medioambientales, que impone un espacio protegido haya trastocado ciertas costumbres vecinales. «Por ejemplo, ahora tenemos solicitada la concentración parcelaria y el Parque Natural te limita». No obstante, este representante municipal considera que Arribes del Duero ha favorecido al municipio; «se han arreglado caminos, sendas, fuentes, los lagares, molinos... hemos recuperado un patrimonio del pueblo que en muchos casos estaba perdido. Sin olvidar las casas rurales que se han abierto, todo ha venido arrastrado por el Parque Natural», destaca José Ignacio Isidro.

Gracias a las ayudas llegadas a través de la Consejería de Medio Ambiente, Villardiegua de la Ribera ha rehabilitado, por ejemplo, la casa del ermitaño, ha construido el museo etnográfico o el centro de interpretación. Así lo destaca el primer edil, Silvestre Antonio Fernando, partidario del Parque Natural y satisfecho con estos diez años desde la declaración. «Se han hecho obras que de otra forma no habríamos podido» puntualiza el alcalde, que también percibe un aumento de los visitantes a la zona desde que Arribes del Duero forma parte de la red de espacios naturales de Castilla y León.

«Ha representado una importante fuente de ingresos porque el visitante siempre deja algo»

<Alejandro Fermoselle >

Fermoselle

«No ha sido el gran elemento dinamizador para la zona que esperábamos»

<Manuel Ramos >

Fariza

«No ha perjudicado en nada y los temores iniciales de limitaciones no han sido para tanto»

<Edesio Cardeñosa >

Moralina

«Hemos podido abordar algunas mejoras gracias a las ayudas que de otra forma no saldrían»

<Silvestre A. Fernando >

Villardiegua de la Ribera

«Todo espacio impone restricciones pero el balance es más positivo que negativo»

<José Ignacio Isidro >

Villadepera

«Ha aportado una importante inyección económica pero los recortes pueden ser un paso atrás»

<Francisco Javier Sánchez >

Torregamones