La población de Cañizal permanecía ayer expectante tras conocer la validación de una quiniela que fue premiada con el jugoso premio de 540.735 euros.

El caso ha despertado aún más sorpresa por cuanto corresponde a un boleto en el que se gastaron solo dos euros, que permitieron rellanar cuatro apuestas.

El boleto fue sellado en el bar del pueblo regentado por Santiago Sierra, que asegura que el beneficiario «no puede ser una peña porque éstas juegan cantidades algo mayores».

El hecho es que ayer el bar comenzó a recibir desde primera hora de la mañana personas interesadas en conocer o saber algo del afortunado, «pero nadie dice nada y todo el mundo está pensando quién ha podido ser» al decir de Sierra.

Santiago Sierra afirma que «hace ilusión dar un premio de este montante, que sería aún mayor si hubiera caído a alguien de la zona». En el bar de Santiago Sierra paran personas de Cañizal, pero también de los pueblos de la zona como Vallesa del Olmo, Parada de Rubiales, Castrillo, Fuentelapeña y otras localidades del entorno que, a veces, deciden jugarse «dos o algunos euros a la quiniela». El bar, del que es titular Yolanda Pérez, fue ayer el centro de atención por la suerte de sellar un boleto, con 15 aciertos, y altamente gratificado.