Las organizaciones agrarias estiman que el campo español podría registrar pérdidas superiores a 1.500 millones de euros por la sequía sufrida en los últimos meses, según han señalado a Europa Press los representantes de las diversas asociaciones tras reunirse ayer en la Mesa de la Sequía con el subsecretario del Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, Jaime Haddad.

Así, el secretario general de la COAG, Miguel Blanco, insistió en que los sectores más afectados son la ganadería extensiva, que podría haber cosechado ya pérdidas por valor de 500 millones de euros, y los cereales, ya que un tercio de sus cultivos peligra si no llueve en los próximos días, generando pérdidas de 1.000 millones de euros. No obstante, Blanco ha remarcado que la ganadería intensiva también se está viendo afectada por la falta de precipitaciones, de modo que el consumo de piensos en lugar de pastos podría suponer unas pérdidas de entre 2.000 y 2.500 euros diarios.

Además, el presidente de Asaja, Pedro Barato, insistió en que la sequía afecta a todo el territorio, aunque con mayor incidencia en zonas como Aragón, Castilla y León, Castilla-La Mancha, Extremadura y Andalucía, a la vez que advirtió de que hay pérdidas que «hoy no se ven», como son las que se podrían producir en los cultivos de vid y olivo. Como ejemplo, Barato subrayó que sólo mantener en Castilla-La Mancha el sector del vacuno puede suponer 800.000 euros diarios.

Por su parte, el subsecretario de Agricultura y Medio Ambiente, Jaime Haddad, anunció la puesta en marcha de un grupo de trabajo entre organizaciones y el Ministerio con la esperanza de que en una semana se puedan poner en común las posibilidades de actuación existentes. «Espero que en esta semana consigamos llegar a una definición de medidas que sean bien recibidas por los sectores afectados».

Asimismo, ha asegurado que España tiene «probablemente» el seguro agrario «más desarrollado» de Europa y ha insistido en que ya se está trabajando para valorar los daños irreparables e indemnizarlos. Descartó la posibilidad de declarar como zona catastrófica cualquier región española, mientras que en cuanto a las ayudas de «minimis»-ayudas inferiores a 200 000 euros que se eximen de la obligación de notificación previa a la Comisión Europea- apeló a las conclusiones de la Mesa de la Sequía.

Por su parte, la consejera de Agricultura y Ganadería, Silvia Clemente, ha convocado una reunión del Consejo Regional Agrario para el próximo 30 de marzo con el objetivo de analizar con los representantes de las organizaciones profesionales agrarias la situación del campo regional y posibles medidas a adoptar ante una sequía «preocupante» y cuya principal incidencia está ahora en el sector ganadero.

Por otro lado, las organizaciones agrarias UPA y COAG denunciaron ayer en un comunicado recogido por Efe que la Junta «sigue sin abonar a los ganaderos de la Comunidad la prima de vacas nodrizas de 2011». «Los ganaderos se encuentran al límite, debido a la enorme sequía que padece nuestra región y que está generando elevados costes en la alimentación».