Agentes del Servicio Territorial de Medio Ambiente de la Junta de Castilla y León han tenido que intervenir a lo largo de los últimos días, más para persuadir que para multar, ante los continuos robos de castañas sufridos en fincas particulares y en plantaciones municipales. Los propietarios de castaños afirman que «tenemos que estar todo el día en el castañar, recogiendo, porque si no nos dejan sin ninguna. Al coger tantas creemos que puede ser para luego venderlas».