La Asociación vecinal «Texus», de Requejo, presentó ayer ante el Ayuntamiento un escrito alegando el rechazo vecinal a la ubicación de una escombrera de las obras del Tren de Alta Velocidad en el monte de UP Mazorreña y en fincas particulares.

La escombrera ocupará tanto como 85 campos de fútbol y con capacidad para 2,5 millones de metros cúbicos. El colectivo recrimina a las administraciones el que se elija Requejo como único municipio de toda la comarca en el que centralizar los residuos del Tren de Alta Velocidad. La asociación precisa que «una obra de rango estatal no puede cargar todos los efectos negativos y daños colaterales sobre un solo municipio» y recuerdan que se han rechazado otras cuatro ubicaciones.

La Asociación a través de su secretaria, Emilia González Iglesias, ha informado que de ejecutarse la escombrera en la zona señalada «se estaría permitiendo y facilitando la degradación medioambiental de una zona limítrofe a acuíferos, arroyo y torrentes, que suministran sus aguas al río Requejo, afluente del Tera, ríos estos que cuentan con una especial protección al estar catalogados como lugares de Interés Comunitario (LIC). El colectivo solicita un pleno extraordinario abierto. Señalan al alcalde del municipio como «conocedor de que, tanto en la elaboración de encofrados como en la excavación de túneles, se utilizan cemento inyectado y otros productos tóxicos que, en forma de lodos, serán vertidos en la escombrera junto con el resto de materiales». Dicen que de no tomarse medidas correctoras los productos altamente contaminantes pueden filtrarse a los acuíferos de la zona. Afirman que también sería afectada la canalización que suministra agua al depósito de la red de abastecimiento para consumo de la población.

El colectivo vecinal ha dado traslado de la carta remitida al Ayuntamiento también a la Subdelegación de Gobierno, y paralelamente al conjunto del vecindario, mediante una circular informativa.

La Asociación ha trasladado su « total oposición» a la ubicación de la escombrera. Alega que se ha ocultado la verdad, desde el Ayuntamiento, en concreto el dictamen favorable de la Alcaldía al uso del suelo, lo que demuestra el conocimiento por parte del alcalde de los hecho.