Dos centenares de vecinos y de residentes temporales de San Marcial (Zamora) denunciaron hoy que llevan dos años y cinco meses sin agua potable debido a la alta concentración de nitratos detectada en los análisis realizados en la localidad, ubicada a 12 kilómetros al suroeste de la capital zamorana, y que es pedanía del municipio de El Perdigón. "Es un problema de todo el pueblo de San Marcial. Desde hace dos años y cinco meses no tenemos agua potable y tenemos que acudir cada martes a las cuatro de la tarde a recoger el agua en garrafas al camión cisterna que nos la trae", explicó Antonino Delgado, portavoz vecinal. "Es denigrante, por no recordar que quien tiene algo que hacer a esa hora, no tendrá la oportunidad de recoger el agua o se verá obligado a pedir el favor a algún vecino", añadió.

Ante esta situación, un centenar de vecinos de la localidad firmaron un escrito dirigido al pleno del Ayuntamiento de El Perdigón en virtud del cual aseguran retirar "la confianza" y "emprender el camino que hasta ahora han sido incapaces de recorrer". En dicho escrito, los habitantes de San Marcial recuerdan que "se trataba de dotar a nuestro pueblo de agua potable en la red de suministros" e insisten en que "lucharán con todos los medios legales a su alcance para que dicha necesidad básica sea reestablecida".

Antonio Delgado, junto el vecino del pueblo Ignacio Santamaría y la residente temporal Alicia Bueno, portando camisetas con la leyenda ´Yo amo San Marcial´, criticaron las gestiones realizada hasta el momento por la alcaldesa de El Perdigón, la socialista Amelia García. "El Ayuntamiento nos dice que está haciendo algo y no se entiende, después de tanto tiempo con garrafas", consideró. "El Ayuntamiento está muerto. Hoy hemos visto a la alcaldesa pedánea en la Subdelegación del Gobierno e iba a la Diputación. Qué casualidad, el mismo día que hacemos esta reivindicación pública", aseguró, apuntando que "reivindicaremos por todos los medios que tengamos a nuestro alcance que el agua sea potable y corra por el grifo de nuestras casas".

Documentación

Por su parte, la alcaldesa del municipio, Amelia García, aseguró que lleva "mucho tiempo" trabajando en recabar la documentación necesaria para solucionar el problema y expresó su malestar por lo que considera "criticas tremendamente injustas" contra su gestión, apoyada por el alcalde pedáneo, Luis Santamaría. "Hemos estado moviéndonos sin descanso y soy la primera a la que le fastidia que los vecinos, muchos de ellos de edad avanzada, tengan que ir a recoger el agua potable. Hemos tenido que buscar un terreno, hemos tenido problemas con el registro y que buscar la financiación", explicó, haciendo referencia a la zona donde, en principio, se tendrá que hacer un nuevo pozo de más de 200 metros de profundidad para surtir de agua a San Marcial y cuyo presupuesto ronda los 90.000 euros, de los cuales correrá a cargo del municipio el 20%. "Es algo ya consignado aunque será la Diputación de Zamora la que adjudicará la obra", anotó.

En este contexto, Amelia García, quien señaló que las protestas "coinciden sospechosamente con la cercanía de las elecciones municipales", recalcó. "No hay plazos porque no nos corresponde a nosotros establecerlos", agregó. "Confiamos en que sean lo más breves posibles", insistió.

"Dos años y medio de espera demuestran que tenemos paciencia", dijo el portavoz vecinal. Además aseguró que "no sé si hay que hacer otro pozo o si el que hay habrá que pintarlo de amarillo pero hay que hacer algo".

La plataforma vecinal pedirá estos días una reunión con el presidente de la Diputación de Zamora, Fernando Martínez Maíllo. "Tenemos muy claro que el pueblo ya ha levantado la voz y no nos vamos a callar hasta que tengamos agua potable", rubricó.