El territorio de la Raya de España (Zona oeste de Zamora y Salamanca) y Portugal (Tras Os Montes y Alto Douro) reintroducirá definitivamente el ganado caprino en los pueblos fronterizos con vistas a frenar la abundancia y descontrol de maleza en los montes y praderas y de esta manera reducir el riesgo en la creación y propagación de incendios forestales. Así lo decidía en la mañana de ayer sábado en Mogadouro, aprobando el proyecto «Self Prevention», por unanimidad de los asistentes, la asamblea general de la agrupación europea de cooperación territorial «Duero-Douro», que cuenta como socios con 187 municipios españoles y portugueses, entre ellos numerosos ayuntamientos alistanos, sayagueses y sanabreses.

Finalmente serán 150.000 las cabras encargadas de actuar como el método más natural y de la mejor manera contra los fuegos forestales: la prevención. Si no hay maleza la propagación será mucho menor y las tareas de extinción se serán mucho más factibles.

Self Prevention estará integrado por un total de siete empresas diferentes (sociedades anónimas), tres en Portugal y tres en España. Nuestro país acogerá la séptima denominada «Empresa Madre».

La inversión económica se irá definitivamente a los 90.471.695 euros. La mayor cuantía de la llevarán las 110 explotaciones caprinas: 50 extensivas (8.838.400 euros), 20 semiextensivas (19.059.319 euros) y 40 intensivas (38.118.638). La puesta en marcha de 11 queserías tendrá un coste de 11.726.295 euros, la central láctea 2.746.898 y la industria de cárnicas 3.275.250. Así mismo se habilitarán 6 tiendas-bar con un coste de 1.019.12 euros cada una y 6 tiendas normales con un precio por unidad de 872.472 euros. La fábrica de pienso para abastecer las cabras se llevará 889.068 euros y el centro de logística 4,326.000.

El programa «Self Prevention» es bueno y así lo vieron los españoles y portugueses al conocer ayer el plan de negocio que asegura su viabilidad tanto económica como social y medioambiental. En total se crearán 712 puestos de trabajo directos, lo cual contribuirá a la creación de empleos y asentar la población en aquellos pueblos que decidan unirse a la iniciativa pues habrá que contratar cabreros y gente para la logística. A partir del día 10 de enero los técnicos comenzarán a visitar los ayuntamientos interesados. El concelho de Vimioso, rayano con Alcañices, fue el primero en ofrecerse en el transcurso de la asamblea general.

Los pueblos interesados en ofrecer terrenos deberán hacerlo a través de cesión y por un mínimo de quince años. La compensación se le hará mediante aciones.

La idea parece buena: la cabras recorrerán los campos diezmando hierbas y arbustos pero a la vez generarán diferentes productos y derivados como la leche y la carne de cabrito, yogures, queso, natas e incluso se le buscará destino comercial y utilidad a su abono natural. Así se cumplen dos objetivos la lucha contra los incendios y la generación de riqueza real.

Las previsiones barajadas en un primer momento apuntan a que del aprovechamiento de la leche y sus derivados se podrían generar 30.444.286 euros anuales. Una cosa de tiene y se dejó muy claro: «La rentabilidad económica creada en los campos y tierras será para las gentes que los habitan».

Los particulares podrán ser socios aportando capital para la compra de rebaños o aportando tierras que sirvan de pasto al ganado.