Cuatro años después del inicio de las obras del nuevo Ayuntamiento de Monfarracinos, este fue inaugurado ayer con motivo de la festividad en honor de San Martín de Tours, patrón de la localidad.

Las nuevas instalaciones municipales fueron inauguradas con la presencia del presidente de la Diputación, Fernando Martínez Maíllo; la secretaria general de la delegación de la Junta de Castilla y León María del Carmen Rodríguez Maseda; el secretario general de la Subdelegación del Gobierno, Dionisio Ferrero García y el alcalde del municipio Manuel Martín.

La obra, que ha tenido un coste total de 487.000 euros, ha sido financiada por la Diputación con una cuantía en torno a los 117.000 euros; por el Gobierno central con 146.500 euros, por la Junta de Castilla y León con 95.000 euros y por el propio municipio que ha contribuido con más de 128.000 euros.

El regidor aseguró que «el nuevo edificio municipal ha supuesto un logro importante para el pueblo por el tiempo transcurrido hasta finalizar las obras y porque el local en que se estaban desarrollando las actividades municipales no reunía condiciones óptimas». Manuel Martín explicó que la edificación cumple todas las expectativas al albergar «las principales dependencias del municipio como son la Casa Consistorial y el centro médico».

La nueva edificación cuenta con tres plantas. Así, en el sótano se ha ubicado el archivo y en la planta baja se encuentra el despacho de la secretaría, el despacho de la auxiliar administrativa, el aseo, y una sala de reuniones, que a la vez se utiliza para el despacho de un día a la semana por la arquitecta y por la Agrupación del Juzgado de Paz, cuando le sea necesario. En esta misma planta y con acceso por otra calle se encuentra el consultorio médico que dispone de un vestíbulo, una sala de espera, aseo, consulta médica y consulta de enfermería. Ambas partes tienen una puerta interior que los comunica.

En la primera planta está el salón de Plenos, el despacho de la Alcaldía y un aseo. Asimismo, existe una dependencia, en dos alturas, en la que, por ahora, no se han ejecutado las obras y en la que un futuro podría ubicarse la biblioteca municipal. El proyecto contempló también la instalación de un elevador, con silla, para acceder a la planta alta, muy alabado por los mayores de la localidad. En otro orden de cosas el alcalde de Monfarracinos reclamó a la empresa a Iberdrola que agilizara el enganche que dote de la potencia suficiente al nuevo edificio para que, al menos, las personas mayores puedan acudir al consultorio médico en condiciones confortables antes de que llegue el frío del invierno.