La Denominación de Origen Arribes, que ayer celebró en Villar del Buey la VIII Fiesta de la Vendimia, espera obtener este año una extraordinaria cosecha que puede alcanzar, de seguir una climatología favorable, «1.200.000 kilos de uva», según las estimaciones del enólogo Carlos Capilla.

El gran reto de la entidad vitivinícola es conseguir adentrarse «en los países pretendidos por todo el mundo: Estados Unidos, Japón y China»; mercados que están en el punto de mira de toda Denominación y Calificación.

La Fiesta de la Vendimia 2010 -la cuarta desde que Arribes consiguiera la Denominación de Origen- fue organizada sin fastos pero con excelentes detalles. Se inauguró ayer tarde en presencia del delegado del Gobierno, Miguel Alejo, que estuvo acompañado por representantes de la Junta de Castilla y León, de la Diputación y de los municipios ribereños productores de la uva y elaboradores del vino, así como del alcalde del municipio, el popular José María Nieto, y del presidente de la Denominación, Manuel Moya, que resaltó «la calidad del producto y la expansión de comercio más allá de las fronteras españolas».

La Denominación Arribes integra a un total de 14 bodegas y 371 viticultores, repartidos por Zamora y Salamanca.

El pregón corrió a cargo de la coordinadora del Club de LA OPINION-EL CORREO DE ZAMORA y presidenta de Unicef Zamora, Carmen Ferreras, que aludió a sayagueses forjados en la tierra y que destacan en diferentes áreas como el sociólogo de Pereruela, Amando de Miguel, el delegado del Gobierno Miguel Alejo, de Almeida, y el periodista fermosellano Julio César Iglesias. Habló de la importancia histórica de Sayago como territorio fronterizo, de la definición indistinta de Las Arribes (Salamanca) y Los Arribes (Zamora). Destacó asimismo la importancia de pregonar, «que viene de antiguo», y resaltó el valor de la variedad Juan García, «que se hizo mister mundo, al denominarse así el modelo elegido para promocionar el vino de la Denominación».

La pregonera realizó un recorrido por los pueblos del arribanzo, siempre colonizado por el cultivo de la vid. También se remitió al pasado bíblico, a un Adán «representado con una hoja de parra», y calificó a Noé, como «el creador del vino de autor». Valoró el trabajo de todos aquellos que hacen posible que pervivan los viñedos arraigados en los bancales, y remató su exposición con una oración al vino, cedida por Felisa Prieto, de Palacios del Pan; un rezó que casi considera casi un pecado suplantar el vino por el agua, y que Ferreras ofició con una copa de tinto en la mano.

Por su parte, Miguel Alejo afirmó que «detrás de la fiesta de la Vendimia hay trabajadores, artesanos y gente comprometida con el desarrollo de Sayago». Subrayó que «Sayago es un verdadero paraíso, con un paisaje extraordinario, con una gran riqueza, con viñedos y el buen vino; y la Denominación es un esfuerzo por dar valor a la riqueza de aquí».

Alejo habló «del maridaje del vino con otros productos como el queso o la carne» y reiteró que en Sayago «hay una riqueza natural muy importante, con un gran valor medioambiental». Sayago, dijo, «es un paisaje de mil estrellas» en relación a la calificación hostelera .

Abogó, como su costumbre, «por hacer un esfuerzo conjunto, incluidas las administraciones, y ser capaces de buscar las cosas que unen», sin descartar el marcar las diferencias cuando lleguen los momentos oportunos, como son los electorales.

El presidente de la Denominación de Origen Arribes, Manuel Moya, señaló que «Arribes se expande y se extiende para dar a conocer sus preciados caldos y vinos porque es una Denominación que quiere abrirse a otras zonas de Sayago».

También agradeció la buena acogida «de las pedanías» del municipio de Villar del Buey que durante los pasados días han organizado con éxito diferentes actividades relacionadas con el sector del vino.

El alcalde del municipio de Villar del Buey, José María Nieto, tomó la palabra para agradecer la presencia de los diferentes responsables de las instituciones que ayer asistieron al festejo. La subdelegada Pilar de la Higuera, el procurador popular Óscar Reguera, el diputado de la zona José Ignacio Isidro tomaron parte en el festejo. Nieto también significó la colaboración de los pueblos del municipio por su buena disposición, y de los que dijo que «vuestros son los viñedos y vuestros son los vinos».

Igualmente tomó el micrófono una vecina, Encarna, típicamente ataviada, para recitar una poesía, recogida en Villarino, relativa al mundo del vino. «Bodeguero que pisas las uvas/ al estilo que pisa el abuelo/ písalas fuerte, que son el fruto mejor del majuelo» versificó.

La plaza de la Iglesia de Villar del Buey se convirtió ayer en un escenario de gran calado vitícola, donde la gran moral también sirvió para realzar, con su imponente tamaño, la estampa conformada puestos donde se exhibían toda suerte de objetos y elementos relacionadas con el viñedo, el vino y la elaboración de los caldos.

No faltó la comitiva de carros elegantemente engalanados con parras, canastos de uvas y personas típicamente vestidas. Tres de los cinco burros que siguen en pie en Villar del Buey tomaron parte en la escenificación.

La jornada culminó con una cena de confraternización y la animación musical del grupo «Mayalde».