La localidad de Villalcampo se metía de lleno en la celebración de los días grandes de sus fiestas patronales en honor a «Nuestra Señora la Virgen de la Encarnación», con la celebración de una merienda que contó con la participación de cientos de comensales, la mayoría del pueblo, pero también muchos de ellos llegados de otras poblaciones cercanas y lejanas hasta el pueblo enclavado en los «Arribes del Duero».
La fiesta no sabe de crisis y el Ayuntamiento ofreció en la convidada popular por todo lo alto con un total de 500 kilos de costillas de cerdo y 200 de chorizo fresco de Rabanales que fueron asados cuidadosamente a la brasa en la lumbre de encina y aderezados con el mejor vino.
El evento llevó su trabajo y salio adelante gracias a un grupo de personas que trabajaron altruistamente toda la tarde, con el consiguiente esfuerzo y calor, en la preparación en la plaza que hay frente a la Residencia de la Tercera Edad «Virgen de la Encarnación». Los comensales se deshicieron en alabanzas para la organización: «La carne y el chorizo están en su punto: exquisitas». La organización cifraba en unas 2.100 las personas participantes (tres por cada kilo de productos consumido).
Culminada la degustación gastronómica de productos de la tierra el grupo de dulzaineros «Los Campusinos», de Villalcampo, fueron los encargados de animar los bailes tradicionales donde los hombres y mujeres, vecinos y foráneos, dieron rienda suelta a la alegría y a la diversión con los mejores bailes a ritmo de dulzaina y tamboril.
Los festejos de Villalcampo, que se iniciaron con las competiciones deportivas de fútbol sala, el 27 de agosto, ya han desarrollado numerosas e interesantes iniciativas de las que han podido disfrutar tanto niños, como jóvenes y mayores.
Uno de los novedosos atractivos es la novedosa exposición sobre el Parque Natural de los «Arribes del Duero» cedida por la Junta de Castilla y León que las personas interesadas podrán admirar hasta la jornada de hoy domingo.
