Treinta voluntarios del proyecto de investigación y difusión del patrimonio arqueológico protohistórico de la provincia de Zamora participan a lo largo del mes de agosto en la cuarta campaña de excavaciones que desde 2007 se llevan a cabo en el castro de «El Castillón», en Santa Eulalia de Tábara.

Tras los «excelentes» resultados obtenidos en las dos últimas campañas, las excavaciones de este año pretenden completar la información referente a una de las viviendas tardoantiguas del yacimiento, además de continuar precisando la información sobre el trabajo metalúrgico en los siglos IV-VI después de Cristo. «Uno de los objetivos claves de esta nueva campaña es continuar trabajando en la evolución histórica de este enclave que nos permita conocer en qué forma fue habitado durante la Edad de Hierro y la Edad de Bronce».

Los voluntarios continuarán de esta manera con la exploración de la vivienda visigoda, donde quedó pendiente una estancia que «nos permitirá tener una imagen global de la casa». Así lo explicó ayer José Carlos Sastre quien, junto a Oscar Rodríguez, dirige el proyecto arqueológico que, entre otros patrocinadores, cuenta con el amparo de Caja Rural.

Además de la estancia visigoda, los trabajos arqueológicos de este verano se centrarán en el centro metalúrgico, concretamente en dos estructuras «que ahora mismo no sabemos si eran un horno o una fragua, pero sí muestran que se trabajaba la metalurgia del hierro». Y el tercer objetivo de las excavaciones será la muralla, la parte defensiva del castro para comprobar si hay asentamientos de la edad de hierro.

La cuarta campaña de excavaciones ha tenido gran eco entre los estudiantes, con más de un centenar de solicitudes, entre los que se han seleccionado 30 participantes procedentes de diversas universidades españolas y extranjeras. Así, en Santa Eulalia de Tábara habrá miembros de las universidad es de Granada, Salamanca, Valladolid, Santiago de Compostela, la Universidad Complutense de Madrid, la Autónoma, Vigo, el País Vasco, Huelva León y Extremadura. Del extranjero llegan estudiantes de Lituania, Canadá, Polonia y Eslovaquia.

Además de las labores propias de excavación, limpieza y clasificación de materiales, a los voluntarios se les proporcionará una visión del patrimonio arqueológico y cultural de la provincia de Zamora, con la visita a diversos lugares.

José Carlos Sastre agradeció la colaboración de los alcaldes Antonio Ferrero y Segismundo Prieto, de Santa Eulalia y Moreruela de Tábara, «por todo lo que se han molestado para que podamos tener las mejores instalaciones posibles para el alojamiento de los voluntarios».