S. Fernández

La playa de Ricobayo se asemeja este año a un lago artificial, ya que el embalse se encuentra a 4,5 metros por debajo de su cota máxima. Este hecho era impensable años anteriores.

La zona de baño de la localidad cuenta con un merendero propiedad del Ayuntamiento, un restaurante privado y un embarcadero donde los particulares tienen sus propios barcos que utilizan para la pesca.

El embalse es un lugar idóneo para la pesca y la práctica de deportes náuticos.

Su situación a 22 kilómetros de Zamora y su completa dotación en cuanto a infraestructuras convierten a la playa artificial en uno de los principales lugares que los zamoranos escogen para huir del calor y disfrutar de un día de tranquilidad rodeados de naturaleza.

Los españoles no son los únicos que disfrutan de las infraestructuras sino que son cada vez más los portugueses que acuden a la playa de la localidad debido, principalmente, a la cercanía del país vecino, ya que Miranda de Douro se encuentra a tan solo 35 kilómetros.