La Dirección General del Medio Natural de la Junta de Castilla y León ha autorizado al coto de caza de Otero de Bodas, «El Muelo», el vallado por tramos de la margen que linda con la carretera nacional 631, que hace de límite con la reserva regional de Caza de la sierra de La Culebra. Es un vallado que fue solicitado por la presidencia del coto para amortiguar el alto número de accidentes de tráfico provocados por la fauna y que mantiene al acotado en una situación económica un tanto crítica.
Responsables del coto señalaron ayer que el vallado de los siete kilómetros tiene un coste de unos 42.000 euros, por lo que la determinación será, de momento, proceder a vallar «el punto más conflictivo» y donde mayor número de siniestros se contabilizan. La pretensión es que la operación pueda llevarse a cabo contando con subvenciones concedidas por la Administración para la mejora y la gestión cinegética de los escenarios cinegéticos.
La elevada accidentalidad ocasionada por la fauna en el trayecto de Otero de Bodas queda puesta de manifiesto en el hecho de que la última aseguradora ha abonado una cuantía superior a los 70.000 euros por los siniestros denunciados.
La elevada cuantía de los pagos ha sumido al coto de caza a un constante cambio de compañías aseguradoras al negarse las suscriptoras a renovar las pólizas.
El presidente, a la vista del abultado número de expedientes y de sentencias que cargan al coto el pago de los daños, también ha puesto en conocimiento la situación ante Tráfico para solicitar medidas como la instalación de radares para conseguir que los conductores aminoren la velocidad y, en consecuencia, se reduzcan o rebajen el calado de los accidentes.
En estos momentos también se está procediendo a la instalación de barreras quitamiedos a ambos lados de la carretera N-6321, a ambos lados de la localidad de Otero de Bodas. Asimismo se llevó a cabo un ensanchamiento de la vía y, durante los últimos años se ha procedido a la limpieza de una superficie de ocho metros a ambos lados de la carretera.
Los responsables del coto de caza de Otero de Bodas consideran que todas estas medidas pueden servir para paliar de algún modo la accidentalidad, en cuanto que los animales pueden sentirse refrenados en el momento de llegar a un punto limpio o a una barrera, pero consideran que no resuelve definitivamente el problema, que también pasa por la actitud de los conductores.
El coto de Otero de Bodas mantiene la importancia de las monterías no por el mero afán de conseguir buenos trofeos sino por la importancia de poner coto a la población de animales, especialmente jabalíes, que junto con los ciervos, es la especie que mayor numero de accidentes provoca.
