Un vecino de Zamora exige a la Junta de Castilla y León que tome las medidas necesarias para que las turbinas eólicas de tres parques ubicados en la provincia no generen «contaminación lumínica» eliminando las actuales «luces intermitentes y estroboscópicas que se pueden observar a más de 50 kilómetros de distancia» en la zona geográfica comprendida entre los municipios de Montamarta, Santa Eufemia del Barco, Olmillos de Castro, Manzanal del Barco y Carbajales de Alba.

Francisco José Fernández, gran aficionado a la astrología, asegura que sus denuncias están basadas en «gran contaminación lumínica de ciertas zonas de la provincia y porque en ellas ya no se pueden observar las estrellas». En su escrito, el denunciante expone que los generadores instalados en la provincia de Zamora son del modelo Ecotécnia Eco80 a los que se les ha instalado varios sistemas de señalización luminosa. Así, afirma que «este sistema de señalización luminosa responde a los criterios establecidos desde la Dirección General de Aviación Civil del Ministerio de Fomento, en concreto de la Subdirección General de Sistemas de Navegación Aérea y Aeroportuaria, Sección de Servidumbres Aeronáuticas, en un documento denominado "Señalamiento e Iluminación Turbinas Eólicas", pero según he confirmado después en Zamora y en la comunidad, ya hay otros parque eólicos con turbinas de aerogeneradores que superan los 100 m de altura y que no cuentan con este sistema».

Francisco José Fernández mantiene una «batalla abierta» que inició el pasado verano al escribir misivas denunciando esta situación a ocho entidades, de las cuales, «solo una me ha contestado». Por otro lado, explica que el marco legal de la contaminación lumínica se ha completado en el año 2008 con la publicación del Real Decreto 1890/2008, de 14 de noviembre, «por el que se aprueba el Reglamento de eficiencia energética en instalaciones de alumbrado exterior y sus Instrucciones técnicas complementarias EA-01 a EA-07, que tiene como uno de sus objetivos la evitación de la luz intrusa o molesta y del resplandor luminoso nocturno» y exige a la Junta de Castilla y León que adopte las medidas necesarias para llevarlo a cabo ya que hay varias Comunidades Autónomas que ya tienen sus propias Leyes de Contaminación Lumínica, y muchas otras tienen borradores o, ya avanzados proyecto de ley, en el mismo sentido. Incluso algunas tienen oportunas líneas de ayudas y subvenciones para modificar alumbrados públicos y evitar este tipo de contaminación».

Fernández resalta el gran número de personas que se han puesto en contacto con el asesorándole y apoyándole en su cruzada particular. A pesar de todo se muestra «optimista» y asegura que solo espera que «algún día se quiten esas luces en la provincia zamorana y yo, de momento, sólo me limitó a poner mi granito de arena».