El Ayuntamiento de Villalpando ha mostrado su «preocupación» por el estado de la Puerta Villa de la localidad tras conocerse la existencia de un nuevo desprendimiento de la sillería y la continua degradación de la piedra de la base que lo mantiene en pie.

A pesar de las actuaciones llevadas a cabo en el emblemático monumento por parte de la Junta de Castilla y León a principios de este año el continuo deterioro que se observa hace que se insista en la «consolidación total» del tramo amurallado.

Fuentes municipales aseguran que «estamos seguros que la Puerta Villa no corre riesgo de caerse pero la sistemática erosión de la piedra, que cae convertida en arena, nos hace pensar qué será esto cuando comience a llover con fuerza». Según explicaron estas fuentes «se supone que las últimas intervenciones realizadas en el monumento ya han concluido y suponemos que si no siguen es por falta de presupuesto».

Las primeras catas y excavaciones arqueológicas en la Puerta Villa comenzaron a realizarse en el mes de octubre del pasado año con el fin de evaluar el estado real en que se encontraba el emblemático monumento del siglo XII y sus alrededores. Estos trabajos pretendían documentar la estructura como paso previo a los trabajos de restauración y tenía un presupuesto de intervención de 13.600 euros.

El Equipo de Gobierno ha mostrado también su «decepción», por no haber sido informado sobre los resultados de las excavaciones realizadas junto a la Puerta de San Andrés y si los proyectos de consolidación van a seguir adelante. Asimismo, reconocen que el vaciado de la arena de los cubos ha favorecido en gran parte al monumento, ya que «las humedades constantes en la piedra han desaparecido, el agua fluye, pero la degradación de la piedra sigue a pasos agigantados».

La Puerta Villa es una de las cuatro puertas de entrada que tenía el recinto amurallado que rodeaba la población en el siglo XII, en la época de Fernando II. De las cuatro entradas a la localidad, hoy, solo se conservan esta y la de Santiago, ambas construidas en sillería con dos arcos apuntados que conforman una bóveda de cañón.

A la preocupación por la Puerta Villa se une también el estado en que se encuentran los tramos de las murallas de la localidad, tanto los de la plaza Yeguarizo como otros restos que se encuentran diseminados por el pueblo, que «se pierden irremediablemente. La muralla se encuentra desaparecida en muchos tramos. En otros está en el interior de propiedades particulares donde no se puede actuar y en las partes que dan acceso a la vía pública, se observa la pérdida de masa y los continuos desprendimientos de los cantos». Fuentes municipales insisten que uno de sus mayores proyectos «es el mantenimiento del Patrimonio Histórico de la Villa», pero considera que las administraciones «imponen muchos requisitos para hacer obras cerca de los monumentos protegidos y no dan facilidades para intervenir en ellos cuando se necesita». Por otro lado, aseguran que «estamos de acuerdo en que existan normas urbanísticas en torno a un monumento pero también es de recibo que se cuide el estado del monumento en cuestión».