"Esto ya no es una emergencia, es un desastre", dijo Correa en su programa semanal de radio transmitido hoy desde la zona costera y después de un sobrevuelo del mandatario por las zonas afectadas por las inundaciones.

Tras lamentar la muerte de 16 personas por las inundaciones, Correa pidió unidad a sus compatriotas y a las autoridades locales para afrontar de mejor manera la emergencia que ha provocado pérdidas por 161.144.611 dólares en el sector agrícola.

De acuerdo con el Ministerio de Agricultura, Ganadería, Acuicultura y Pesca, hasta el momento se han perdido 114.384 hectáreas, gran parte de ellas pastizales para ganado, arroz, cacao, plátano y maíz.

La provincias costeras de Manabí y Guayas son hasta el momento las que más pérdidas han reportado, aunque Walter Poveda, el ministro de Agricultura, anotó hoy que también la provincia de Los Ríos se ha visto seriamente afectada con cerca de 110.000 hectáreas de cultivos dañadas.

Correa, que también aseguró que el invierno afecta a algunas provincias de la zona andina, agradeció a Argentina, Venezuela, España y Japón la ayuda que han comprometido para Ecuador con el fin de asistir a los damnificados.

El Ministro de Seguridad Interna y Externa, Gustavo Larrea, recordó hoy que hace dos días llegó un avión de Argentina con 17 toneladas de ayuda, y añadió que hoy llegará ayuda de Japón y España.

Asimismo, dijo que desde Venezuela se ha ofrecido una ayuda por tres millones de dólares y agregó que los gobiernos de Estados Unidos, Israel, Corea y Chile han prometido su ayuda, aunque no ofreció detalles.

El ministro de Defensa, Wellington Sandoval, que también participó en el programa semanal de radio de Correa, consideró que la región costera es "un lago enorme" e informó de que en este momento 2.200 militares ayudan a los damnificados y aseguró que están listos para aumentar ese número en caso de ser necesario.

Sandoval instó a los habitantes de las zonas afectadas a salir de las áreas de peligro y a reubicarse temporalmente en los albergues.

La ministra de Desarrollo Urbano y Vivienda, María de los Ángeles Duarte, informó de que "el Gobierno trabaja en planes de reubicación para las familias que han perdido todo, tal como se lo ha hecho en las provincias de Tungurahua y Chimborazo", afectadas por la erupción del volcán Tungurahua.

"No nos interesa hacer un reasentamiento temporal que una vez alejadas las lluvias signifiquen un problema, nuestra idea es elaborar y construir urbanizaciones definitivas y seguras", subrayó la ministra de Vivienda.

Según el jefe de Estado, la emergencia requerirá la inversión de unos 200 millones de dólares, lo que significa "un fuerte impacto para la economía nacional".

De acuerdo con el gobernante, las inundaciones han obligado a la evacuación de 265.000 personas.

Recordó que decretó el estado de emergencia en todo el territorio nacional, bajo la coordinación de las Fuerzas Armadas, lo que permitirá "mucha mayor capacidad de ejecución" en las acciones de atención a los afectados.

La ministra de Salud, Caroline Chang, puntualizó en la cadena de radio que no existe, hasta el momento, ningún tipo de epidemia.