El Quesos El Pastor de la Polvorosa dio ayer un paso importantísimo hacia la salvación demostrando que tiene nivel para ganar a cualquier rival en esta liga, como ayer fue el Gernika, uno de los candidatos al play off. En un partido muy igualado con unos minutos finales de infarto, el equipo de Lucas Fernández sacó a relucir su casta y su poderío físico con un enorme trabajo en defensa que terminó por agotar a su rival. Fue el partido del regreso de Sabrina Cinilli que volvió a ser la del principio de temporada, y la presentación del nuevo fichaje naranja, la norteamericana Andrea Riley que dejó patente por qué fue el número 8 del draft de la WNBA aunque dejó patente que tiene que adaptarse al juego de su nuevo equipo.

Fue un partido de enorme constancia por ambas partes con parciales igualadísimos y ventajas por una y otra parte que nunca pasaron de los ocho puntos. Lucas Fernández apostó desde el principio por Andrea Riley y la jugadora de Atlanta no defraudó, haciendo mucho daño tanto con sus asistencias como con sus penetraciones en la zona del Gernika.

En el Zamarat, el juego fue siempre de conjunto pese a todo, y el resto de las jugadoras cumplieron con creces la función que se les había encomendado, hasta llegar a los últimos minutos con el marcador igualado. El trabajo bajo los tableros del Quesos El Pastor provocó que el Gernika cometiera varias faltas en los instantes finales que las zamoranas supiero aprovechar para llevarse una nueva victoria que les permitirá alejarse de los puestos de descenso.