La Junta de Castilla y León aprobó ayer en la reunión del Consejo de Gobierno la adhesión al compartimento de Facilidad Financiera para hacer frente a las necesidades de liquidez del segundo trimestre de este año. El acuerdo adoptado permitirá a la Junta acceder a un préstamo de 218,24 millones de euros en condiciones ventajosas, que se une a otro similar por importe de 618,31 millones formalizado en marzo con cargo al mismo mecanismo para cubrir la financiación que era preciso concertar en el primer trimestre.

Esta financiación se instrumentará mediante una adenda al préstamo de 618,31 millones de euros suscrito el pasado 8 de marzo, por el que se materializó la adhesión de la comunidad a la Facilidad Financiera en el primer trimestre. Esto implica que la nueva operación se firmará en las mismas condiciones financieras que la anterior, que resultan ventajosas.

En concreto, el plazo es a diez años -con dos de carencia y los ocho restantes de amortización- y a un tipo de interés equivalente al coste medio de la deuda del Estado a un plazo similar. Cabe recordar, además, que la incorporación a este mecanismo carece de condicionalidad fiscal, es decir, no obliga a elaborar ningún plan de ajuste.

Por otro lado, la Junta no pagó el curso que realizó el diputado popular Pablo Casado durante cuatro días en el campus del IESE de la Universidad de Navarra en Aravaca (Madrid), según explicó ayer la portavoz y consejera de Agricultura y Ganadería, Milagros Marcos, quien sin embargo reconoció que el Ejecutivo corrió con los gastos de la formación de tres técnicos, con categoría superior, durante unas 40 horas. "Es absolutamente falso", sostuvo Marcos durante la comparecencia posterior a la reunión del Consejo de Gobierno.