Una operación conjunta de la Guardia Civil y la Policía Nacional logró detener a seis personas, cinco hombres y una mujer, pertenecientes al clan conocido como "Los Manueles" por su implicación presuntamente en un intento de homicidio ocurrido en Salamanca.

El dispositivo se puso en marcha en mayo de 2017 tras el aviso del 112 sobre la existencia en la calzada de la Autovía de Castilla (A-62), a su paso por Villares de la Reina, de una persona con dos impactos de arma de fuego de pequeño calibre en una de sus piernas, según fuentes policiales.

La operación, que permitidió desarticular la banda dedicada al narcotráfico, permitió detener a un hombre que hacía uso de una identidad falsa para evitar su puesta a disposición judicial como autor de un delito de homicidio cometido en 2008 en León.

A raíz de las investigaciones, se pudo averiguar que la víctima había quedado previamente con otras personas para realizar una operación de compraventa de un vehículo.

Mientras circulaban con el turismo de la víctima para comprobar que funcionaba correctamente, aprovecharon para amenazarlo y dispararle con una pistola dos veces en una pierna, teniéndose que lanzar la victima del coche en marcha para salvar su vida y huyendo los agresores con el coche.

Fruto de las indagaciones posteriores se supo que los responsables del intento del homicidio formaban parte de una organización criminal diseminados por gran parte de España, especialmente en las provincias de Madrid y Toledo.

Esta banda, cuyos integrantes se les considera muy peligrosos tanto por los antecedentes policiales como por la violencia empleada en la comisión de hechos delictivos, hacía uso de una gran movilidad geográfica y usaba identidades falsas para obtener los beneficios económicos.

Por ello, se procedió a la detención de los seis integrantes del grupo delictivo así como al registro de seis domicilios ubicados en los municipios de Parla y Moraleja de Enmedio (Madrid), Seseña y Casarrubios del Monte (Toledo).

Los agentes se incautaron de cuatro armas cortas entre las que supuestamente se encuentra la empleada para el intento de homicidio, dos escopetas y un rifle, tres chalecos antibala y dos turismos. También intervinieron numerosa munición de diversos tipos de armas, dinero, y documentación falsa y falsificada.

Además se localizó una plantación "indoor" de cannabis sativa con un total de 249 plantas y un peso aproximado de 30 kilogramos y otra con la cosecha ya recolectada y 8.044 gramos de cogollos de marihuana preparados para su distribución y 104 gramos de hachís.