El futuro imaginado por el director Robert Zemeckis en su triología más famosa al volante de un Delorean suponía una cambio radical en las condiciones de vida de sus protagonistas marcado por los grandes avances tecnológicos de una sociedad en continúo cambio.

Castilla y León también ha recorrido ese viaje en el tiempo y la Agencia Ical compara lo que fue en sus orígenes con lo que es hoy día, un viaje de progreso que dura ya 35 años y que ha dado lugar a una sociedad más rica e incorporada a una revolución tecnológica, más urbana pero que lucha por sus zonas rurales.

Años de extraordinaria bonanza con ciclos recesivos sin parangón en el tramo final de este viaje en el tiempo han configurado la realidad de una sociedad que sufre el principal problema de la Europa desarrollada, el envejecimiento y la despoblación.

La autonomía llegó acompañada por un aumento exponencial de la riqueza en la base del impulso al desarrollo que supuso la entrada en la UE en el 86. Y es que Castilla y León multiplica en la actualidad por 5,5 su renta per cápita en relación a 35 años atrás, pues frente a los 22.723 euros actuales, en aquel momento se situaba en casi 683.000 pesetas constantes (hoy serían 4.104 euros), según los datos obtenidos por "Ical" en el Instituto Nacional de Estadística (INE), en fuentes gubernamentales y en libros como el de "Geografía de Castilla y León", editado en 1995 por Ámbito. La riqueza llega acompañada irremediablemente de un encarecimiento de la vida, principalmente a partir de la entrada en vigor definitiva del euro en 2002. Tres ejemplos cotidianos, del día a día, ayudan a corroborar este datos, aunque existen muchos más: el precio del periódico ha pasado de 40 pesetas (0,24 euros) a una media de 1,50 euros; el de un café, de 20 pesetas (0,12) a 1,10; y el de un bocadillo, de 55 pesetas (0,33 euros) a un euro y medio. También la luz se ha encarecido notablemente, pero existe más del doble de potencia instalada que ha mejorado la calidad de vida, con 14.282 megavatios.

El porcentaje de personas bajo el umbral de la pobreza se mantiene en el 17 por ciento, con el fuerte impacto de la última crisis sin precedentes aunque los mecanismos de protección social, los pilares del estado social de derecho que se conformaron con la llegada de la democracia, sostienen sistemas de protección inimaginables en año precedentes.

En 1983 dijo adiós la UCD que tanto éxito dio a un presidente del Gobierno abulense, Adolfo Suárez, pero también se detuvo al conocido empresario José María Ruiz Mateos y se expropió Rumasa.