Madrid.- El Ministerio de Educación de Brasil pondrá en marcha, en colaboración con Castilla y León, un programa de intercambio de estudiantes universitarios, que permitirá a alumnos del país latinoamericano formarse en las universidades de la Comunidad y aprender castellano, según las instrucciones que ayer dio el presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, a su equipo en el desayuno de trabajo que compartió con el presidente de la Junta, Juan Vicente Herrera, dentro de la segunda visita oficial que realiza a España.

Herrera, quien defendió las «enormes posibilidades» que se abren en el país, tanto desde el punto de vista inversor, como turístico y cultural, consideró Brasil como «un objetivo principal» en todas las acciones de Gobierno, desde la exterior, pasando por la turística y a la vinculada con el impulso del Plan del Español.

En relación con este último aspecto, explicó que el reciente Proyecto de Ley 11/161 del Gobierno de Brasil, que obliga a los alumnos de enseñanzas medias de entre 14 y 16 años a estudiar lengua española, también se perfila como una oportunidad en formación de profesores brasileños para la impartición del castellano, al tiempo que implicará que once millones de escolares aprendan este idioma. La reunión contó con la presencia del rector de la Universidad de Salamanca, José Ramón Alonso, y de los patronos de la Fundación de Cultura Hispano Brasileña, entre los que se encuentran responsables de compañías como Banco Santander, Telefónica, Globalia e Iberdrola, entre otras. Herrera mantuvo que desde que se fundó, hace siete años, la Comunidad colabora con la Fundación, por medio del impulso también del Centro de Estudios Brasileños, dependiente de la Universidad de Salamanca, cuyas sedes se ubicarán en el Palacio de Maldonado.

El presidente de la Junta también aprovechó el encuentro para pedir a los patronos de la Fundación que las universidades de Castilla y León tengan mayor presencia en sus acciones, con el objetivo de avanzar en «convertir Castilla y León en el lugar de referencia, a través de las universidades y academias privadas, de la enseñanza del español».

Herrera defendió en todo momento los vínculos históricos y culturales de Castilla y León con Brasil, junto a la base de relaciones institucionales académicas y empresariales existentes, «porque se trata de una de las economías emergentes de enorme interés para los empresarios». En este sentido, recordó que entre los años 2002 y 2006 las exportaciones de Castilla y León en el país carioca aumentaron un 80 por ciento, cerrándose el último ejerció con un total de 60 millones de euros. «Se trata de un destino, todavía manifiestamente mejorable, pero donde nuestra balanza comercial está creciendo a fuerte ritmo en los últimos años», indicó.