Tres de cada cuatro estudiantes de Castilla y León implicados en incidencias relacionadas con la convivencia escolar son varones y casi siete de cada diez de ambos sexos, también afectados por la misma situación, cursan Educación Secundaria Obligatoria (ESO). Son datos del informe "La convivencia escolar en Castilla y León" correspondientes al pasado curso escolar (2016/2017) que el consejero de Educación, Fernando Rey, presentó en Valladolid.
Los casos informados de posible acoso (una de las variadas formas de incidencia o conflicto) han sido 412, casi un 58 por ciento más que el curso precedente, aunque la cifra de confirmados, 47 en total, ha disminuido en un 16 por ciento, mientras que los de ciberacoso notificados censan 82, sin datos comparativos por haber sido incluidos por primera vez. En general, el número de incidencias de cualquier índole comunicadas en ese periodo por 650 colegios e institutos ha sido de 23.095, de las cuales 2.278 guardan relación directa con el profesorado en forma de agresiones físicas, faltas de respeto verbal e imposición autoritaria de criterios. La mayoría de los avisos se encuadran en el desarrollo de las tareas académicas (16.848), por delante de los conflictos entre iguales -excepto el acoso-(3.278); en las agresiones al profesorado (2.278); el destrozo de materiales y hurtos (453); y la falta extrema de interacción entre iguales (238).
