La Guardia Civil de Ávila ha desarticulado una trama sobre caza ilegal de la cabra hispánica en la Sierra de Gredos, cuyo valor por pieza oscila en una media entre los 12.000 y 20.000, en la denominada operación "Milady" por la que se encuentra detenida una persona y otras cinco investigadas por presuntos delitos de cohecho, administración desleal, falsedad documental y contra la hacienda pública.

Aunque continúan las gestiones por la posibilidad de otras formas de actividades delictivas de las detectadas, la Guardia Civil detectó indicios suficientes para sospechar que con la colaboración necesaria de algún trabajador de la Reserva y "Operadores Turísticos de actividad cinegética" conocidos como "Orgánicos" consiguen de forma ágil y no ajustada a derecho la documentación necesaria para que sus clientes puedan realizar viajes con fines de caza y cobrar especimenes de cabra hispánica.

La investigación, según informa la Guardia Civil en un comunicado, se inició el pasado mes de marzo cuando la Sociedad de Propietarios de la Sierra de Gredos pone en su conocimiento la documentación "aparentemente manipulada" para amparar cacerías de ciudadanos extranjeros.

Este hecho, conforme a las mismas fuentes, fue corroborado por el Servicio de Medio Ambiente de la Junta de Castilla y León en Valladolid al detectar una licencia de caza falsa que había sido utilizada por un ciudadano estadounidense para cazar un macho de cabra hispánica en la Sierra de Gredos.

La Guardia Civil explica que desde el inicio de las investigaciones se confirmó que la "licencia falsa" era un simple error cometido por una trama organizada, la cual evidenciaba los ilícitos negocios desarrollados dentro de un entramado a través del cual se manipulaban irregularmente permisos de caza de macho de cabra montés en la Reserva de Caza Regional de la Sierra de Gredos.

Es la Administración Autonómica quien a través del Plan de Gestión Cinegético establece cupos de caza adjudicando a través de convenio administrativo a la Asociación de Propietarios de la Sierra de Gredos una cantidad que supera habitualmente los 200 machos de cabra hispánica. De no adjudicarse parte del cupo, la "Asociación de Propietarios" puede adjudicar directamente las autorizaciones nunca a menor precio que el establecido como salida en la mencionada subasta.

Según la Guardia Civil, llama la atención que la mayoría de estas adjudicaciones son adquiridas por los denominados "Orgánicos" u "Operadores Turísticos" quienes las adquieren con unas ventajas económicas que se hurtan al resto de los ciudadanos, como regalos de piezas o precios más bajos.

A ello se une que la adquisición de las piezas de caza no han sido gravada fiscalmente con el IVA que le pudiera corresponder lo que podría suponer un perjuicio para la Hacienda Pública, hasta el punto que alguno de los "Operadores Turísticos" investigados no tributan a la Hacienda Pública bajo ningún concepto, ni tan siquiera están dados de alta en la Seguridad Social, a pesar de facturar anualmente cientos de miles de euros.