Castilla y León es una de las ocho comunidades autónomas que registra una tasa de litigiosidad por debajo de la media estatal del 32,6 asuntos por casa 1.000 habitantes, al situarse en 28,1, según el informe estadístico sobre la situación de los órganos judiciales en el segundo trimestre de 2017 difundido ayer por el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ). En los órganos jurisdiccionales de Castilla y León entraron durante el segundo trimestre de 2017 un total de 68.466 asuntos, un 9,3 por ciento menos que hace un año.