El operativo contra el abatimiento irregular de piezas de caza mayor en las montañas del Parque Natural de Babia y Luna, en el término municipal de Cabrillanes, se cerró con la incautación de nueve cabezas de caza mayor. Efectivos de la Guardia Civil de León sorprendieron a una persona haciendo entrega a un taxidermista de nueve trofeos de caza mayor, seis rebecos y tres corzos, pese a carecer del oportuno precinto que estas piezas deben tener.

Tras establecerse un dispositivo de vigilancia y localización de los cazadores, se identificó a dos varones de 37 y 53 años de edad, con domicilio en San Andrés del Rabanedo (León) y Mieres (Asturias), como supuestos autores de la comisión de estos hechos constitutivos de varias infracciones administrativas a la Ley de Caza de Castilla y León.

Los hechos descritos están tipificados en la Ley de caza de Castilla y León como graves, lo que es sancionable con cantidades que oscilan entre los 500 y los 5.000 euros y la retirada de la licencia de caza entre uno y tres años. La sanción también lleva aparejada la indemnización del valor del animal a favor del titular del aprovechamiento cinegético, que en el caso del rebeco macho sería de 9.261 euros por ejemplar y en el del corzo, de 6.174 euros.