Miles personas (8.000 según las organizaciones agrarias y 2.000 según la Policía Local) se manifestaron ayer en las calles de Valladolid para reclamar ayudas directas a los profesionales del campo para paliar los efectos de la sequía y reivindicar la implicación de las Administraciones públicas. En la concentración, en la que hubo agricultores llegados desde la provincia zamorana, se cantaron consignas a favor del sector y pudieron verse mensajes directos contra la ministra de Agricultura, Isabel García Tejerina y la consejera Milagros Marcos.

En la manifestación, que estuvo encabezada por los responsables de las organizaciones convocantes, entre ellos el secretario de regional de UPA, el zamorano Aurelio González, los profesionales del sector agrario de la comunidad urgieron a Junta y Gobierno central "más atención" para un sector que supone un 20 por ciento del PIB regional y que "si se cae, caerán muchos servicios e industrial que hay alrededor", apuntó el coordinador regional de la UCCL, Jesús Manuel González Palacín, quien instó a las administraciones a hacer "un ejercicio mental" para coordinar actuaciones y poner sobre la mesa ayudas que salven las explotaciones porque "no podemos permitirnos el lujo de perderlas por un mal año". Además reclamó mayor voluntad política a Marcos y Tejerina para abordar la crisis del campo en Castilla y León y que constituyan una mesa de negociación entre ambas administraciones, en la que estén presentes las opas, para tratar las ayudas directas.

"El campo es un sector imperante, pero luego se lavan las manos con declaraciones grandilocuentes", señaló.

Por su parte, el presidente de Asaja en la comunidad, Donaciano Dujo, denunció los más de 1.500 millones de euros en pérdidas para el sector que se encuentra en una situación "precaria" determinada por las malas cosechas e insistió en la reivindicación de unos seguros agrarios que cubran todos los rendimientos y ayudas fiscales como la condonación de la Seguridad Social o de las tarifas de riegos, además de otras ayudas económicas y fiscales para los jóvenes agricultores y ganaderos o para los que hayan hechos inversiones en sus explotaciones.

Los sindicatos reclamaron mayor voluntad política a Marcos y Tejerina para abordar la crisis del campo en Castilla y León.