La última inspección realizada en la nuclear de Garoña ha detectado el rastro de un antiguo vertido de cesio radiactivo junto al almacén temporal de bidones y residuos de la central, que "no se detectó en su momento o no se descontaminó adecuadamente".

La contaminación fue hallada el pasado 20 de junio, durante una inspección rutinaria, debajo de tres contenedores de hormigón sin moverse desde 2009, según refleja el último acta de la reunión plenaria del Consejo de Seguridad Nuclear (CSN) publicada en su web este lunes. El diputado de Unidos-Podemos, Juan López de Uralde ha señalado a "Efe" que el cesio es un elemento radiactivo "muy peligroso" y con el que hay que tener cuidado, aunque el CSN alegó en su momento, que "el material radiactivo estaba confinado".