El presidente del PP y de la Junta de Castilla y León, Juan Vicente Herrera, afirmó ayer que la etapa que se abre ahora en el Partido Popular, con la celebración del congreso nacional y los posteriores congresos autonómicos, debe suponer una "oportunidad de introducir en el partido un revulsivo" en forma de nuevas ideas y personas. En su caso, aseguró que lleva "demasiado tiempo" al frente y que es el momento de "ir cediendo determinadas posiciones de responsabilidad".
"Los que llevamos mucho tiempo en el partido, este es mi caso y no quiero hablar de los demás, debemos también tender puentes, ofrecer oportunidades e incluso ir cediendo determinadas posiciones de responsabilidad que ya se prolongan durante demasiado tiempo", declaró a su llegada a la sede del PP en Madrid donde se celebraba la Junta Directiva Nacional en la que, entre otras cosas, se fijará una fecha para el congreso nacional.
Herrera dijo además que serán "beligerantes" para defender una financiación autonómica que atienda las "circunstancias específicas" de este territorio y, como ejemplo, ha visto como "un escándalo" que la A-11 esté aún sin concluir.
Durante su intervención ante el grupo territorial de senadores de Castilla y León constituido ayer, Herrera ha apelado a la triple condición de estos parlamentarios como representantes de España, de esta comunidad y del PP para que actúen de forma coordinada, aunque les ha adelantado que "nunca" les pedirá que entren en contradicción.
Integrado por 29 senadores -dos ellos de designación autonómica, pero con uno pendiente de elección en la actualidad-, se trata del grupo territorial más numeroso de cámara, han destacado en el acto de constitución tanto el portavoz del Grupo Popular, José Manuel Barreiro, como el presidente de Castilla y León, Juan Vicente Herrera, quien les ha pedido apoyo no como "lobby" o grupo de presión, sino como representantes de la comunidad.
A este respecto, el presidente autonómico les pidió a los senadores de su formación que se vuelquen en aquellas materias prioritarias para la autonomía como son la minería, la defensa de un modelo de financiación autonómico válido, las infraestructuras y el empleo público.
