Una jueza de Paterna (Valencia) ha ordenado el archivo provisional de la denuncia que un abogado interpuso a título personal contra la persona que hizo comentarios en una red social sobre la muerte del torero Víctor Barrio, que falleció en julio tras sufrir una cornada. La magistrada considera que los delitos de injurias o vejación injusta grave deben ser perseguidos por el ofendido o sus herederos, y no aprecia indicios de incitación al odio.