Medio centenar de trabajadores de la empresa láctea Lauki de Valladolid retomaron ayer las concentraciones, en la imagen, a las puertas de la factoría donde han denunciado que la actitud del grupo francés "Lactalis" se basa en "dejar pasar el tiempo" y, a pesar de contar ya con dos ofertas de compra sobre la mesa, "no van a vender".