Un tiempo después, para cerrar el círculo, Fonseca creó una industria, Aromáticas del Duero, que permite vender el producto envasado al por mayor una vez cosechado y transformado en aceite esencial.

"Este tipo planta aromática tiene una duración de unos doce años y la inversión inicial se hace el primer año y el segundo, que es de transición, ya da algo de fruto y se entra en alta producción a partir del tercer año. Los rebrotes en las sucesivas campañas completan un proceso similar al de las viñas, aunque nuestro cultivo requiere de menos cuidados y su tiempo de vida es menor", relata.

Al material vegetal -flor y tallo- procedente del cultivo aromático hay que extraerle después la esencia. El trabajo en la destilería se lleva a cabo mediante un proceso muy sencillo, "inyectando vapor a alta temperatura y baja presión y obteniendo así los aceites esenciales", explica Fonseca. Y lo hace con la presencia en el ambiente de un intenso aroma perfumado que relaja un caluroso día en una nave industrial rodeada por un pequeño vivero se semillas y páramos cercanos.

La empresa se dedica a la producción y comercialización de aceites esenciales con destino a la industria de cosmética, la de perfumería, la de droguería para productos de limpieza del hogar y la aromaterapia. Las plantaciones de lavanda y lavandin se concentran en Tiedra y varios municipios cercanos, en las estribaciones de Montes Torozos. "Esta zona es especialmente apropiada para el cultivo de plantas aromáticas dada su altitud media, en torno 825 metros sobre el nivel del mar, un clima continental y las buenas características que presenta el terreno calizo de páramo", indica el empresario.

A su vez señala que, junto a la más industrial en Tiedra, sólo hay otras dos pequeñas destilerías en la comunidad para transformar el producto en Lerma (Burgos) y Peñafiel (Valladolid). Aromáticas del Duero transforma 250 hectáreas propias de cultivo, fundamentalmente de lavandin y unas pocas de lavanda, y otro centenar más hasta alcanzar las 350, propiedad de agricultores de pueblos limítrofes con Tiedra.

Por encima de Castilla y León solo hay otra zona con mayor extensión de esta planta aromatizada en el municipio castellano-manchego de Brihuega, situado en la comarca de La Alcarria (Guadalajara), donde hay tres destilerías importantes de aceites esenciales similares a la vallisoletana.