Miembros del Colectivo Azálvaro localizaron ocho cadáveres de aves protegidas, algunos con "supuestos síntomas de envenenamiento", junto al Centro de Tratamiento de Residuos de Ávila Norte. Los ecologistas encontraron los cuerpos de cinco cigüeñas blancas, dos milanos negros y un buitre leonado.

Después de la localización de los cadáveres, el colectivo ecologista presentó una denuncia al Servicio de Protección de la Naturaleza de la Guardia Civil (SEPRONA) para el posterior levantamiento de los cadáveres y acta o atestado, según protocolo de actuación ante un posible envenenamiento.

El colectivo manifestó mediante un comunicado que algunos de los animales mostraban “claros signos de intoxicación” y otros presentaban “indicios de colisión con líneas eléctricas”.

El colectivo calificó como “tragedia” el suceso y manifestó el “convencimiento” de que el Centro de Tratamiento de Residuos del Consorcio Ávila-Norte, gestionado por la empresa URBASER, es desde su apertura "una de las mayores amenazas para las aves carroñeras del Parque Nacional Sierra de Guadarrama y de la ZEPA Campo Azálvaro-Pinares de Peguerinos”, explicó Azálvaro.

“Ya son demasiados los casos de intoxicaciones, electrocuciones o colisiones con los cables eléctricos” incidió el colectivo “y las soluciones no pueden demorarse”, exigió Azálvaro.