La multinacional Mondelez, propietaria de la antigua Dulciora en Valladolid, ratificó su decisión de cerrar esta factoría que afecta a 220 trabajadores y ha opinado que es poco probable encontrar un comprador ya que la mayor parte de las líneas de producción se van a transferir a otras instalaciones. Mondelez emitió ayer un comunicado tras reunirse con el Comité de Empresa de la planta vallisoletana en el que deja claro que su posición sobre una posible venta de la planta no ha variado y se muestra "abierta" a explorar cualquier posibilidad.