La Guardia Civil alertó hoy del incremento de llamadas telefónicas desde prisiones en Chile en las que el interlocutor hace creer a la víctima que tiene secuestrado a un familiar y le exige una cantidad de dinero que oscila entre los 2.000 y 10.000 euros a cambio de su liberación. Las llamadas se efectúan desde los móviles de algunos internos y se realizan aleatoriamente, posiblemente valiéndose de una guía telefónica de España.

No obstante, la Guardia Civil apunta en un comunicado que en alguna ocasión también se han realizado llamadas desde España por algún grupo organizado y las provincias que se están viendo afectadas principalmente son Salamanca, Madrid, Valencia, Toledo, Córdoba, Asturias y Castellón.

Los delincuentes, para aumentar la angustia de la familia y conseguir más rápidamente el rescate, fingen la voz de la persona que dicen tener secuestrada y solicitan el rescate para su liberación a través de empresas de envío de dinero.