El debate sobre política general de la Junta de Castilla y León, en el que el presidente autonómico somete a examen su gestión del último año, tendrá lugar el 29 y 30 de junio pese a que los grupos parlamentarios de la oposición apostaban por su celebración en la semana siguiente de julio para distanciarlo de las elecciones generales del 26 de junio.

Finalmente, ha primado el cumplimiento del Reglamento de la Cámara autonómica que recoge que los debates deben realizarse durante el periodo ordinario de sesiones, decisión que también respaldaba la Junta. Todos los grupos de la oposición, salvo el PP, habían acordado solicitar que el debate sobre el estado de la comunidad se celebrara en la semana del 4 al 8 de julio para dar más tiempo a la preparación del pleno, que es uno de los más importantes del año junto al de presupuestos, pero también para evitar que coincidiera con la resaca electoral. No en vano, los portavoces de esos grupos consideran que la actualidad informativa los días 29 y 30 de junio estará centrada en el debate postelectoral.

La viceportavoz del Grupo Parlamentario Socialista, Virginia Barcones, apuntó tras la reunión de la Mesa de Portavoces que el debate sobre política general de la Junta debía celebrarse en julio para tener la relevancia política que le corresponde.