Castilla y León cerró el primer trimestre de 2016 con una deuda de 10.582 millones de euros, lo que supone 1.238 más que los contabilizados en el mismo periodo del año anterior, con un avance del 13,2 por ciento, según los datos publicados ayer por el Banco de España.

El conjunto de las autonomías acumularon una deuda de 264.175 millones de euros, que suponen un crecimiento del 9,9 por ciento.

El informe publicado por la autoridad monetaria indica que en términos porcentuales, la deuda acumulada por Castilla y León se situó a finales de marzo en el 19,4 por ciento del PIB, frente al 17,8 por ciento de 2015. El conjunto de las autonomías registró una deuda sobre PIB del 24,3 por ciento, cuando un año antes estaba en el 22,9 por ciento.

La deuda de las empresas públicas de Castilla y León se situó en el periodo de estudio en los 168 millones de euros, con un avance del 15,8 por ciento; cuando en el conjunto de las comunidades se situó en los 4.886 millones, con una merma del 10,7 por ciento.

En el conjunto de España, la deuda pública alcanzó entre enero y marzo los 1,095 billones de euros, un nuevo récord con el que además se supera por segunda vez desde que existen registros en el Banco de España (1995) la "barrera psicológica" del 100 % del PIB. La primera vez fue en el primer trimestre de 2015, cuando llegó al 100,2%, mientras que ahora la deuda de las administraciones ha alcanzado el 100,5 % del valor estimado del conjunto de los bienes y servicios del país. Desde entonces, en los tres siguientes trimestres de 2015, en porcentaje de PIB la deuda había ido disminuyendo, pero ahora se ha vuelto a producir un alza. En millones de euros -sin tener en cuenta el alza paralela del PIB- la deuda del conjunto de las administraciones ha ido rompiendo récords cada mes y cada trimestre desde 2008.