La Junta de Castilla y León aprobó ayer, en el Consejo de Gobierno, un Decreto-Ley por el que se prohibe la muerte de las reses de lidia en presencia de público en los espectáculos taurinos y populares en la comunidad, de manera que el polémico festejo del Toro de la Vega se tendrá que adaptar porque el animal no podrá ser lanceado hasta su muerte en el campo de esta localidad.
El consejero de la Presidencia, José Antonio de Santiago-Juárez, afirmó en la rueda de prensa posterior al Consejo de Gobierno que en la comunidad existen trece espectáculos tradicionales taurinos y el Toro de la Vega es el único al que se da muerte al animal en presencia de público.
De Santiago-Juárez aseguró que existían dos salidas, ante la polémica que todos los años suscita este festejo entre sus defensores y detractores, y explicó que una era la protección de esta tradición -data de 1534, aunque con cambios- o su prohibición, «que flotaba en el aire».
Con la medida adoptada, que tiene que convalidarse en las Cortes de Castilla y León antes de un mes, el consejero aseguró que se adapta la tradición a la sociedad actual y su sensibilidad para que perdure en el tiempo. «Lo que hacemos es proteger la tradición, es lo que hemos hecho», aseveró.
En tal sentido, recordó que tras la celebración del último Toro de la Vega se dijo por el presidente de la Junta que se iba a abrir una reflexión sobre este torneo y significó que desde entonces se han mantenido «muchas consultas» con todas las partes implicadas del mundo de la tauromaquia y se ha decidido que «lo sensato» era adaptar la tradición para que no se pierda ante la realidad actual.
La presidenta del Partido Animalista Pacma, Silvia Barquero, calificó de «histórica» la decisión de la Junta de prohibir la muerte del Toro de la Vega de Tordesillas, pero advirtió de que se trata de un primer paso, «pero no definitivo, ya que nuestro objetivo es lograr que ningún toro se hostigado o alanceado por capricho». Barquero, que reconoció que «hoy es un día para celebrar», aseguró que el decreto ley aprobado ayer por el Consejo de Gobierno es fruto del trabajo que desde el Pacma se viene llevando a cabo desde hace más de una década contra este «terrible festejo». El secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, dijo ayer que la prohibición de matar reses el Toro de la Vega es una «muy buena noticia» y manifestó que su programa electoral incluye una ley contra el maltrato animal.
Por su parte, el presidente de la Federación de Tauromaquia Popular de Castilla y León, Francisco Javier Hernández Calvo, anunció que que llegarán «hasta el fondo de la cuestión» y presentarán un recurso de inconstitucionalidad al decreto ley aprobado por la Junta. Al respecto, mostró todo su apoyo al Ayuntamiento de Tordesillas en todas las acciones que desarrolle en este sentido y remarcó que enviarán una carta al presidente de la Junta, Juan Vicente Herrera, para pedirle explicaciones.
«Nos sentimos traicionados por la cobardía del PP», manifestó Hernández Calvo, quien arremetió con el jefe del Ejecutivo, «a quien no hace mucho se le caía la baba criticando que se prohibían los toros en Cataluña».
