La Audiencia Provincial de León ha condenado a penas que suman 46 años de prisión a R.P.F., el monitor acusado de abusar sexualmente de dieciséis menores en un campamento en el municipio leonés de Carucedo.

El juez le ha impuesto una pena de dos años de cárcel por un delito de revelación de secretos -por el que además deberá abonar una multa de dieciocho meses con una cuota diaria de seis euros-; tres años por cada uno de los delitos continuados de abusos sexuales y dos años por cada uno de los cuatro delitos de abusos sexuales, según la sentencia que el Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León ha dado a conocer hoy.

El juez también inhabilita al acusado para ejercer cualquier profesión u oficio, contribuido o no, que conlleve el contacto regular y directo con menores durante el tiempo de la condena y le prohíbe aproximarse a menos de 200 metros a cada uno de los menores durante seis años.

En el caso de las víctimas de abusos continuados, tendrán que ser indemnizados en la cantidad de 3.000 euros cada uno, mientras que el resto de menores tendrán que ser indemnizados con 1.000 euros.

La Audiencia Provincial de León, no obstante, absuelve al acusado del delito de corrupción de menores.

La Fiscalía solicitaba para R.P.F. un total de 234 años de prisión.

El monitor, en prisión desde 2012 cuando fue detenido, estaba acusado 16 delitos de corrupción de menores y 16 de delitos de abusos sexuales, doce de ellos de carácter continuado.

Fue su mujer la que denunció los hechos cuando encontró varios dvd con contenido pedófilo grabados en el campamento de Carucedo (León) y también en unas piscinas de Madrid en las que fue socorrista.