Castilla y León cuenta con un Estatuto de Autonomía bueno en líneas generales pero bastante mejorable, coincidieron ayer en diagnosticar los portavoces parlamentarios del PP, PSOE, Podemos, C's y Grupo Mixto, como un adecuado punto de partida para emprender la cuarta reforma en sus 33 años de historia.

"Hay que centrar todos los esfuerzos en lo que nos une porque sólo desde el consenso tiene sentido una reforma de estas características" manifestó Carlos Fernández Carriedo (PP). Luis Tudanca (PSOE) ha discrepado sobre el concepto del consenso. "Ni en el caso de la Constitución ni en el del Estatuto de Autonomía, deben ser textos "pétreos", inamovibles", dijo.

Para Pablo Fernández (Podemos), un buen Estatuto consiste no sólo en añadir lo que le falta, sino en el desarrollo legislativo como el artículo 95, relativo a las consultas populares, uno de los que más posibilidades ofrece de "democracia directa y participativa", observó. David Castaño, en representación de C's, ha centrado su intervención en una reforma de la ley electoral para lograr la circunscripción única, 85 procuradores, la limitación de mandatos, y la eliminación de aforamientos El último interviniente fue José Sarrión (IU), quien puso el acento en los derechos sociales.