El policía en segunda actividad -ahora jubilado- que siguió a Montserrat tras cometer el asesinato, dijo a preguntas del defensor de la autora confesa de los disparos y su hija explicó hoy que perdió de vista “dos o tres minutos” a Montserrat y que durante todo el tiempo que la tuvo en su punto de mira ésta no se cambio de ropa ni arrojó el bolso en el que portaba el revólver.

“Se fue por el semáforo donde termina Lucas de Tuy y siguió andando por Colón. No la perdí de vista. Desde que miró para atrás no hizo ninguna parada, iba con la mano metida en el bolso. Muy ligera pero no corría”, manifestó. Después, transcurridos los minutos en que se le despistó, volvió a verla. “Se quedó sorprendida y me miró fijamente. En ese momento vi un vehículo policial y les hice señas. Entonces ella desapareció y un señor que estaba en una terraza me señaló hacia un vehículo en el que ella estaba sentada en el asiento del conductor. Le dijo a los policías que era ella la autora de los disparos”, detalló el agente jubilado.

La esposa

La esposa del policía jubilado explicó que vieron acercarse a una mujer que había visto en televisión y detrás a otra. Después de cruzarse oyeron el primer disparo y vieron a Carrasco desplomándose. La otra mujer (Montserrat) se puso entonces a la altura de la cabeza de la víctima y “le pegó los tres tiros, salió humo y todo y rebotó la cabeza”.

“Esa persona se colocó el pañuelo entre los dientes, vino hacia nosotros, nos miró y entonces te quedas pensando Tierra, trágame. La observamos cómo cruzaba y le dije a mi marido que yo llamaba al 112 y que él hiciera lo que tuviera que hacer y la siguió”, explicó a preguntas de los abogados. La mujer reconoció después la parka que llevaba Montserrat cuando se la mostró un policía.