La Fiesta de la Moto, que se celebra en Valladolid este fin de semana, ha permitido reavivar en la ciudad la llama de la tradicional concentración motera Pingüinos, que no se ha celebrado durante los dos últimos años, aunque la lluvia ha deslucido algo el evento que ha superado los 5.000 inscritos.

A primera hora de la mañana los moteros que han acampado en la zona de la antigua hípica militar, que acoge la fiesta motera hasta el domingo, han encendido algunas hogueras, aunque el frío no era intenso y el día ha amanecido soleado.

Lo que peor han llevado los acampados y asistentes a la Fiesta de la Moto ha sido la lluvia que ha caído durante el día y la noche de ayer y que ha echado para atrás a algunos aficionados a las motos.

Sin embargo, habituales a la concentración Pingüinos, que se celebraba anualmente a principios de enero en Valladolid y que se ha suspendido en las dos últimas ediciones por diferentes motivos, sí han asistido a esta fiesta alternativa que pretende ser de transición hasta que se pueda recuperar Pingüinos.

Es el caso de Javier Díaz y Soledad Díaz, padre e hija, que llegaron ayer a Valladolid y que han asistido a las últimas ediciones de Pingüinos y que el año pasado acudieron a la concentración Motauros de la localidad vallisoletana de Tordesillas.

El ambiente es "flojillo", han asegurado, antes de añadir que el agua, el desconocimiento y la división, ya que también se celebra del 8 al 10 de enero otra concentración, "La leyenda continúa", en Cantalejo (Segovia) a la que han asesorado algunos de los organizadores de Pingüinos, han podido echar para atrás a más moteros.

"La división hace daño al mundo de la moto", ha asegurado Javier Martínez, una aficionado vallisoletano, que ha considerado que es "difícil" que Pingüinos pueda volver a celebrarse en Valladolid por la división interna en el club organizador, Turismoto, y por las diferencias entre dicha agrupación y el Ayuntamiento de Valladolid.

Desde Teruel ha llegado a la Fiesta de la Moto vallisoletana Juan Cruzado, acompañado por dos paisanos y otro aficionado de Alcoy (Alicante) que sí habían asistido anteriormente a la tradicional concentración motera de Valladolid.

Los cuatro han resaltado que el ambiente es "muy flojo" en comparación con Pingüinos, que conseguía reunir a más de 25.000 moteros, que la organización del evento es "joven" y que se ha concretado "tarde".

En lo que han coincidido todos es en que "mejor algo que nada" y en que si se sigue celebrando la Fiesta de la Moto, puede ganar asistentes con el tiempo.

A las instalaciones de la antigua hípica se han acercado también aficionados a los motos procedentes de Cataluña, Andalucía o Navarra y de otros países como Francia y Portugal, aunque sobre todo de Castilla y León.

El tiempo ha dado una tregua por la mañana y ha podido celebrarse el desfile de cientos de motos de diferentes tipos por la céntrica Acera de Recoletos de Valladolid, cuyo ambiente, aunque con menos asistentes, ha recordado al que también se desarrollaba en la tradicional Pingüinos.

Esta noche están previstos los conciertos de Mago de Oz y Carlos Jean en el escenario ubicado en la antigua hípica militar y todos los aficionados esperan que el tiempo respete para poder disfrutar del resto de actividades programadas.