El portavoz de Medio Ambiente del Grupo Socialista en las Cortes de Castilla y León, José Luis Aceves, planteó ayer la apertura de una mesa de diálogo con la representación legal de los trabajadores de Tragsa que permita plantear un nuevo plan empresarial para el mismo e incrementar su capacidad de producción y empleo. Así lo recoge una proposición no de ley que pretende evitar el Expediente de Regulación de Empleo (ERE) que afecta a 181 trabajadores en la comunidad.

En un comunicado, fuentes socialistas, indicaron que la regulación de empleo es "profundamente perjudicial para los intereses del país y de la comunidad en términos de empleo y para la realización efectiva de los encargos de obras y servicios que necesita la administración".

"En la actual situación de empleo en nuestro país y en Castilla y León, esta decisión sería absolutamente inaceptable por el profundo impacto que tendría sobre la economía del país y de nuestra comunidad Autónoma. Además, los datos económicos y productivos del grupo, pasados dos años del inicio del procedimiento, demuestran que la situación ha cambiado en positivo sobre las estimaciones de pérdidas", explicó Aceves.