La asociación Empresa Familiar de Castilla y León (EFCyL) apuesta por mejorar la competitividad de sus compañías para crear 4.000 empleos en los próximos cuatro años, porque las expectativas de los asociados son buenas tras sobreponerse a la crisis económica. No en vano, el 93 por ciento de las empresas prevé aumentar o mantener su plantilla en 2015 y el 97 por ciento, su facturación. Una mejora de la competitividad que pasa por una colaboración público privada, aunque no subvenciones, para la atracción de talento senior, la mejora de los procesos, la apuesta por la FP Dual y el apoyo a la industria 4.0. El presidente de Empresa Familiar, Alfonso Jiménez, reclamó ayer un mayor apoyo a las compañías, que aportan el 15 por ciento del PIB regional y el 7 por ciento de la población ocupada, para que puedan crecer.

Aseguró, en declaraciones recogidas por la Agencia Ical, que las empresas familiares de la comunidad están una situación mejor que antes de la crisis al apuntar que, desde 2007, han aumentado la contratación un 32 por ciento. "Queremos crecer y crear empleo porque para eso hemos nacido", precisó.

Eso sí, reconoció que la economía de Castilla y León está caracterizada por un "raquitismo empresarial", en comparación con otros países europeos, que impide a las compañías ser más competitivas o apostar por la I+D+i y la internacionalización. EFCyL ha elaborado un documento que recoge una serie de medidas para mejorar la competitividad como la atracción del talento sénior entre las pequeñas y medianas empresas que no pueden competir en salario y condiciones con las grandes corporaciones. De ahí que la asociación apueste por un programa de atracción temporal del talento, a través del "interim manager" de directivos y mandos medios, para que estos profesionales sean "palanca de cambio" en las pymes durante un periodo de tiempo.