El anteproyecto de ley de Medidas Tributarias que presentó ayer la consejera de Economía y Hacienda, Pilar del Olmo, ratifica lo comprometido hace meses sobre una bajada del tramo autonómico del Impuesto sobre la Renta y la supresión del denominado "céntimo sanitario" en 2016.

Del Olmo informó ayer del contenido de esta ley que acompaña la aprobación de los presupuestos en el Consejo de Gobierno y al término compareció en una rueda de prensa en la que ha detallado que la bajada del IRPF puede suponer una merma de ingresos para la comunidad de unos 45 millones de euros, aunque de materializarse tendrá efectos en 2018, cuando se liquide con Hacienda el año 2016.

La bajada será de 0,5 puntos para ingresos entre 0 y 12.450 euros -al pasar de un tipo del 10% al 9,5%-, mientras que los dos tramos siguientes se modifican para que personas que ingresen entre 12.450 y 20.200 euros paguen el 12 por ciento, de lo que se beneficiarán con dos puntos menos de tributación quienes se encuentren en la horquilla con ingresos a partir de 17.707,2 euros, ya que hasta ahora pagaban el 14 por ciento.

Del mismo modo, el siguiente tramo también eleva su máximo y quienes ingresen entre 20.200 y 35.200 euros tributarán al 14 por ciento, mientras que hasta ahora quienes tenían entre 33.007,2 y 35.200 euros pagaban al 18,5 por ciento.

Del Olmo ha destacado que la bajada afectará a todos los contribuyentes y ha explicado, en este sentido, que los ciudadanos más beneficiados serán los incluidos en los tramos de ingresos de entre 17.707 y 20.200 euros y los 33.007 y los 35.200 euros, por cambiar de ubicación.

Sobre el "céntimo sanitario", Del Olmo ha previsto una merma de recaudación en 2016 de unos 50 millones de euros y ha explicado que desde su implantación ha reportado unos ingresos a la comunidad de 270 millones de euros. Preguntada por sus sensaciones al dictar la retirada de este impuesto a partir del próximo 1 de enero, la consejera defendió la "responsabilidad" con la que actuó la Junta de Castilla y León al instaurarlo porque en aquel momento era necesario: "Lo necesitábamos, no nos prestaba nadie, había que seguir pagando los colegios, los hospitales, hubiéramos puesto en peligro servicios esenciales", ha resumido.