La Audiencia de León ha desestimado las diligencias planteadas como atenuantes por la defensa de Montserrat González y Triana Martínez, madre e hija respectivamente y principales acusadas por la muerte de la presidenta de la Diputación de León, Isabel Carrasco, el 13 de mayo de 2014.

La defensa de las dos acusadas en el caso del asesinato de la presidenta de la Diputación de León y del PP provincial pidió ayer que se incorporasen a la causa una serie de documentos que, a su juicio, prueban la "persecución" de la dirigente leonesa a Montserrat González y a su hija Triana Martínez.

Así lo señaló ayer José Ramón García, letrado defensor de la autora confesa de los disparos que acabaron con la vida de Isabel Carrasco: Montserrat González, de 60 años, y también letrado de la hija de ésta: Triana Martínez, de 36, en la vista previa al juicio por el asesinato de la que fue presidenta de la Diputación de León.

El abogado consideró que excluir del procedimiento estos documentos que, en su opinión, prueban el "acoso" y la "persecución" a los que estaba sometida la hija de la autora confesa de los disparos, vulnera el derecho de defensa de esas dos imputadas.

En el auto de la Audiencia también se rechaza la petición de anular las declaraciones en sede policial por entender la defensa de las acusadas que se produjeron vulnerando los derechos de Triana y Montserrat, al tratarlas de convencer para que colaboraran y confesaran los hechos ante de que llegara su letrado.

El auto precisa que se rechaza la admisión de pruebas dada la "extemporaneidad" de la solicitud de su práctica, ya que no fue incluida en el escrito de las conclusiones provisionales, y recalca que no se está vulnerando el derecho de tutela judicial de madre e hija.

En este sentido, precisa que la supuesta persecución sufrida por la hija, por parte de Isabel Carrasco, "estaría en la base del trastorno de ideas delirantes que habría afectado a la madre, motivando la acción homicida", si bien se alega que habría cometido los hechos "en una situación de grave déficit de sus capacidades normales de conocimiento y voluntad".

Por lo que respecta a la pretensión de la defensa de Triana y Martínez de anular su primera declaración ante la Policía, el presidente magistrado entiende que las mismas "carecen de todo valor probatorio, de manera que resulta inútil la pretensión de su nulidad". En la vista previa celebrada el martes, tanto el fiscal como las acusaciones particulares de la familia de la víctima y del PP de León coincidieron en señalar que la defensa de las acusadas trataba de convertir el juicio a Triana y Montserrat en el juicio a Isabel Carrasco, y reiteraron que esas pruebas ya fueron excluidas por no aportar nada a los hechos a juzgar.

El abogado de la defensa de la otra imputada, Raquel Gago, la agente de Policía Local que entregó el arma en comisaría y que recobró la libertad el pasado enero tras siete meses en prisión, señalo que no entendía el "empeño" de las acusaciones en "excluir pruebas" y ha pedido "un juicio justo" con todas las pruebas.