La reina Sofía viajó ayer hasta Salamanca para asistir a la inauguración del II Simposio internacional «Avances en la investigación sociosanitaria en la enfermedad de Alzheimer», demostrando una vez más el respaldo de la Casa Real a las causas sociales.

Un acto que contó con la presencia de la ministra de Sanidad, Ana Mato, del presidente de la Junta de Castilla y León, Juan Vicente Herrera, del Alcalde de Salamanca, Alfonso Fernández Mañueco y del rector de la Universidad de Salamanca, Daniel Hernández Ruipérez, acompañados por diferentes autoridades de la región y de la provincia.

Durante la inauguración, Fernández Mañueco destacó que el Simposio hace de que Salamanca esté a la «vanguardia para difundir las investigaciones del alhzéimer». Una labor que calificó de «muy importante para la sociedad y en concreto para los pacientes y la familia».

También destacó que Salamanca es una ciudad solidaria y que no hay que olvidar que en tiempo de dificultades, «estás son mayores para los que requieren atención continuada». Aseguró que Salamanca y Castilla y León son un ejemplo nacional en atención a los pacientes con alzhéimer y otras demencias, y agradeció a la reina el apoyo que la Casa Real ofrece a la capital del Tormes.

Por su parte, Daniel Hernández pronosticó que en 2.050 se espera que el 30 por ciento de la población española padezca alzhéimer, algo que viene asociado a la mayor esperanza de vida. Por lo que afirmó que la investigación es imprescindible para que «esa longevidad sea disfrutada con más salud y más calidad de vida».

Unos estudios complejos porque implican a muchos factores, lo que hace necesario un «trabajo de manera coordinada y rápida» y para hacer frente «a una sociedad que será diferente» y que tendrá que entender el conocimiento de manera global. Adelantó que próximamente se presentará la versión portuguesa del Centro Virtual del Envejecimiento dentro de los proyectos transfronterizos en que se está trabajando.

La conferencia plenaria del Simposio corrió a cargo del doctor Vladimir Hachinski, presidente de la World Brain Alliance que afirmó que los accidentes cardiovasculares y la enfermedad de alzhéimer aumentan con la edad y destapó que «a menudo, pueden interactuar». Para el Investigador las lesiones del cerebro aumentan el efecto de la demencia, por ello, «es muy importante controlar todas aquellas patologías que nos sea posible». Aseguró que todas las demencias tienen un componente cardiovascular que incide entre el 60 y el 80 por ciento, como es el caso del Alzheimer.

Hachinski descubrió que tener alzhéimer y un componente cardiovascular duplica las posibilidades de desarrollar demencia y actualmente ambas patologías se tratan como si fueran entidades separadas. El doctor canadiense aseveró que las enfermedades cardiovasculares son tratables y evitables, así pues, el hecho de identificar los componentes de todas las demencias vasculares «ofrece la posibilidad de retrasar o impedir la demencia».

El país invitado al simposio en esta edición fue Francia que presentó su plan de lucha contra el alzhéimer de la mano de Benoit Lavallart, director del mismo y centrado en las enfermedades neurogenerativas y que aseguró mejora el acceso al diagnóstico.

En el acto, el presidente de la Junta, Juan Vicente Herrera, destacó que esta comunidad es la que «más empleo genera vinculado a los servicios sociales para personas dependientes: 6,18 por cada mil habitantes, casi el doble que la media de España». Durante su intervención atribuyó a la ciencia y a la sociedad el «éxito» de la mayor esperanza de vida en España.

Si bien, ese logro lleva, según sus palabras, aparejados «algunos retos», entre los que mencionó «el mayor protagonismo del alzhéimer y de otras enfermedades neurodegenerativas».