El Plan Estratégico de Transporte Ferroviario de Mercancías establece una Red Básica para este tipo de productos, que será donde se prioricen las actuaciones y las inversiones del Ministerio de aquí a 2020. En el caso de Castilla y León, Fomento incluye la línea Madrid-Ávila-Medina del Campo-Valladolid-Venta de Baños-Palencia-León Ponferrada hacia Galicia, además de Venta de Baños-Burgos-Miranda de Ebro hacia País Vasco, y Palencia-Reinosa hacia Santander.
Asimismo, se contempla una línea desde Medina del Campo que se dirigirá a Zamora y Puebla de Sanabria hasta salir en Galicia y otra que desde la ciudad vallisoletana, tradicional nudo ferroviario de España, se dirigirá a Salamanca y Fuentes de Oñoro para llegar a Portugal.
Además, el Ministerio de Fomento se ha comprometido con la Junta a estudiar la viabilidad de establecer una nueva línea de mercancías en la Ruta de la Plata, que uniría las localidades de Monfragüe, en Extremadura, con Salamanca, Zamora y Astorga.
El proyecto diseña también un mapa de nuevas terminales de transporte de mercancías con criterios de priorización "pactados con las comunidades". En este caso, el plan fija tres: Salamanca, Valladolid y León, cuya promoción y gestión se desarrollará a través de esquemas de participación público-privada. El objetivo de Fomento es concebir las nuevas terminales intermodales como auténticos centros logísticos con capacidad de generar valor añadido al transporte.
7.000 millones
El proyecto contará con una inversión de 7.000 millones de euros del Estado, las comunidades autónomas y el sector privado, si bien el Ministerio no adelantó hoy qué recursos se destinaran a cada región. De ellos, 2.480 millones se destinarán a infraestructura viaria, mientras que otros 2.520 se dedicarán a las terminales de transporte.
"Planificar es coordinarse y priorizar, y eso significa que todos tenemos que renunciar a algo para concentrar los recursos en aquello que pueda ofrecer mayor beneficio al conjunto de los españoles", señaló el ministro en su intervención inicial. "No puede ser que cada uno vaya por su lado", añadió.
La mejora de la red básica ferroviaria de mercancías contempla actuaciones como la adaptación de las actuales infraestructuras para la circulación y explotación eficiente de trenes de 750 metros de longitud y la electrificación de las líneas existentes que aún no utilicen esta fuente de energía a 25 kv. Ello, según indicó el Ministerio de Fomento permitirá una reducción de costes del 40 por ciento, en el primer caso, y del 13 por ciento, en el segundo. El objetivo es aumentar la competitividad del transporte ferroviario de mercancías en una banda del 25 al 50 por ciento de su situación actual. Asimismo, se contempla una mejora de las instalaciones de seguridad y comunicaciones, la adaptación progresiva de los gálibos a medida que se renueven las líneas y la eliminación de los actuales cuellos de botella.
