La Mesa de Negociación Laboral del Sistema Institucional de Protección (SIP), que lidera Caja Madrid y del que forman parte Caja de Ávila y Caja Segovia, firmó ayer por la tarde un acuerdo de garantías laborales que contempla la negociación de un acuerdo para regular las condiciones de los trabajadores de las siete cajas cuando se incorporen al SIP. En él, se comprometen a efectuar los ajustes laborales principalmente a través de prejubilaciones.

Así lo señalaron después en un comunicado conjunto caja de Ávila, Caja Segovia, Caja Madrid, Bancaja, Caja Insular de Canarias, Caixa Laietana y Caja Rioja, tras la reunión mantenida por las direcciones de las cajas y los representantes sindicales, que demandaron el jueves el cierre de un acuerdo de garantías.

En dicho acuerdo se perfilan las directrices que marcarán la negociación en los próximos meses con el fin de “trasladar a los empleados de las cajas un mensaje de seguridad y garantías”. El documento pactado incluye el “compromiso de mantenimiento de las condiciones consolidadas de los profesionales que pasen a la sociedad central y la aplicación del convenio colectivo de cajas de ahorros en dicha sociedad”.

Apoyo de UGT

El sindicato UGT de Ávila señaló que este acuerdo garantiza las condiciones laborales con las que se acometerán las necesarias reestructuraciones en las plantillas para la puesta en marcha del SIP y el acceso a los fondos del FROB.

Por ello, anunció su voto positivo en la asamblea del día 14 de septiembre, donde cuenta con representantes dentro del grupo de empleados, e hizo un llamamiento expreso al resto de los consejeros para alcanzar un resultado positivo que facilite la integración en el grupo en las mejores condiciones.

A juicio del sindicato, el acuerdo firmado ayer garantiza los derechos de los trabajadores y fija el marco por el que se desarrollarán las futuras negociaciones de cara a concretar los procesos de restructuración y adecuación de las plantillas para todo el grupo.

Acuerdo de garantías

El acuerdo de garantías laborales se estructura en 15 principios, entre los que destacan el mantenimiento de las condiciones laborales de los trabajadores de todas las cajas que pasen a la sociedad central y que cualquier reducción de empleo se efectuará, preferentemente, mediante prejubilaciones, una de las demandas más defendidas por los sindicatos.

Asimismo, se marca que el convenio de cajas de ahorros será el de referencia de la nueva sociedad, que se instrumentarán medidas para garantizar la igualdad de oportunidades de los trabajadores y la apertura de un proceso de diálogo para la armonización de las condiciones laborales de los trabajadores.

Otro aspecto destacado del acuerdo es que se garantiza que cualquier situación de movilidad geográfica que pueda producirse como consecuencia del proceso de integración será objeto de negociación con la representación laboral. También se acuerda la creación de un nuevo plan de pensiones y la igualdad de pensiones dentro de la nueva sociedad central.

El nuevo grupo se convertirá en la primera caja de ahorros española con unos activos de 340.000 millones de euros. Tras la ratificación del contrato de integración del SIP por parte de los consejos de administración, el pasado 29 de julio, la alianza está pendiente de aprobación de las asambleas, que han sido convocadas para el 14 de septiembre, y de la autorización de las comunidades autónomas que lo requieran.